Muy buenas a todos!!
Hoy os traigo un tema que quería abordar hace tiempo y que está relacionado con la palabra “gratis”. Como habréis podido comprobar, es el concepto estrella de este blog y por ello he decidido dedicarle un artículo entero. Creo que aportará aire fresco al blog y un enfoque diferente, con un poco de reflexión por parte de cada uno. Y con esta pequeña introducción empezamos ya.
Significado oficial de la palabra gratis
Para que nos quede bien claro y no haya dudas, según unos cuantos entendidos en el tema ( Wikipedia), el significado oficial de la palabra gratis es el siguiente:
“1. Adverbio. Sin cobrar o pagar dinero. 2. Adjetivo. Que no cuesta dinero o que se obtiene de forma gratuita”
Proviene del latín contracción de gratiis, propiamente ‘por las gracias’, de donde ‘gratuitamente’. De la familia etimológica de grado ‘voluntad, gusto’ (V.). “
Sin ser un lumbreras ni una mente superinteligente, entendemos que gratis es algo que no nos supone gasto alguno o que podemos conseguir sin pagar ni un euro. Ahora, de ahí a que cuando veamos un cartel que pone gratis, realmente lo sea, deberemos mirar la letra pequeña.
Que pensamos cuando vemos la palabra “gratis”
Seguramente cualquiera de nosotros cuando vemos esta palabreja en algún sitio pensamos lo siguiente: “ Ostia de puta madre, no cuesta pasta” .
Eso significa que no nos supone gasto alguno, con lo cual si no esta dentro de nuestras expectativas como producto, nos dará absolutamente igual si es bueno o malo, porque no nos gastamos nada. Este impulso es realmente grande, e incluso nos olvidamos de las desventajas que pueda tener ese producto por lo que os comentaba anteriormente.
Nuestra mente actuaría diferente si nos encontramos delante de dos productos con dos precios muy diferentes entre ellos. Por poner un ejemplo: 2 botes de champú. Uno de ellos vale 0,01 € y el otro 0,15€. Automáticamente elegiríamos el más caro, simplemente porque pensaríamos que es de mayor calidad por ser más caro. El término barato nos infunde más desconfianza que la palabra gratis.
A veces gratis, sale más caro
Seguramente la palabra gratis se emplea en estrategias de marketing para que al final tengas que pagar más. Otro ejemplo claro y rotundo: las ofertas del 3×2 de los supermercados. Tú piensas que realmente te estás llevando una unidad gratis, pero en realidad solo querías un puto bote de tomate. Con lo cual, ya estas pagando más de lo que en un principio querías gastarte, que era una sola unidad. Otro aún más claro: el envío gratis de cualquier tienda online a partir de tal cantidad de €. Solo quieres gastarte 12€ en un productor, por decir algo, pero te hacen creer que si sueltas más billetes, el envío te sale gratis. No te digo más.
Conclusiones
Mi consejo es que siempre que busquemos o encontremos alguna cosa que ponga “gratis”, nos aseguremos de que realmente es así y miremos con lupa si realmente lo necesitamos o si es lo que queremos antes de tirar adelante. Y sobre todo, la última palabra la tienes tú. Tú decides si quieres pagar o no, hay muchas opciones ya lo sabes.
Saludos navegantes!!!!
La entrada ¿Qué provoca la palabra gratis en nuestra mente? aparece primero en NAVEGANDO GRATIS.