La Pirámide escalonada de Zoser, es la primera de las grandes pirámides de Egipto, lleva el nombre del faraón de la III dinastía para el que fue levantado este majestuoso templo funerario, en el 2600 a.C.
Su importancia radica en que hasta su construcción no había en Egipto nada parecido, a pesar de que ya era costumbre la construcción de fastuosas tumbas en el periodo más antiguo de la historia de Egipto, su realización varió para siempre la construcción de los complejos funerarios de los grandes dirigentes del antiguo Egipto, dando lugar a las únicas maravillas del mundo antiguo que aún se conservan en pie, las tres grandes pirámides de Guiza.
Se encuentra emplazada en el gran complejo funerario de Saqqara. El motivo de que se encuentre en este lugar es la proximidad a Menfis, la antigua capital de Egipto en la época de Zoser.
Inicialmente no fue construida como pirámide, sino que su origen es una gran mastaba, diseñada por uno de los más grandes genios de la antigüedad, Imhotep, un hombre con una formación e ingenio que transformó la historia de Egipto. Para hacer algo distinto empezó a modificarla acumulando otras mastabas encima, hasta formar así una pirámide escalonada de seis niveles, dando la forma de una escalera que permitía ascender el espíritu del faraón a la cúpula celeste.
Su importancia en el mundo antiguo se deduce de su sobrenombre, era conocida como la más sagrada.
La singularidad de la obra comienza en que es la primera construida en sillería, grandes piedras talladas y encajadas entres sí, daba una gran resistencia a la construcción de ahí que pudiera crecer en altura, pero tenía el inconveniente de cómo mover el gran peso de las rocas. Imhotep demostraría sus habilidades en este campo de ingeniería diseñando las técnicas y la maquinaria necesaria para el movimiento de los grandes bloques de piedra.
Sus medidas son de 60 metros de altura, 140 de largo y 118 de ancho, su planta no es cuadrada, porque como ya se ha dicho se deriva de una mastaba inicial.
Pero lo más importante está en su interior, lejos de la aparente sobriedad interior de las grandes pirámides de Guiza, esta posee una infraestructura formidable.
De su interior parten 11 pozos de 32 metros de profundidad, unidos por corredores horizontales, con diversas estancias y en su día parece ser que estaba ricamente decorado, la intención era de recrear el palacio del faraón Zoser para que se sintiera en la muerte igual que en la vida.
Se han encontrado restos de la decoración con baldosas azules en algunas salas con los techos pintados como la bóveda celeste, igualmente la que cubría el sarcófago del faraón, estaba decorada como el firmamento para que el faraón pudiera contemplar las estrellas desde su lugar de reposo. El conjunto parecía más un lugar para los vivos que para los difuntos.
Pero a pesar de todo tiene en común con el resto de las pirámides, el que fallara en su cometido principal, proteger los restos sagrados de su propietario, desde muy antiguo la pirámide escalonada, fue saqueada, sus restos profanados y los objetos de valor robados.
En el centro por el que se accede por un pozo de 28 metros por 7 de ancho, se encuentra la cámara funeraria, toda de granito, solamente la losa de granito que la sellaba pesaba 3500 kilos de peso, el esfuerzo y el trabajo para su colocación debió ser inmenso.
Otra diferencia es que la pirámide no es la tumba de una sola persona, se han encontrado sarcófagos pertenecientes a la familia directa de Zoser en las cámaras subterráneas antes mencionadas.
Actualmente, la cámara funeraria se encuentra en grave riesgo y se están realizando trabajos para reforzarla, ya que la bóveda de la misma amenaza con derrumbarse por la tremenda presión a la que está sometida y haberse debilitado por efecto de variaos terremotos sufridos a lo largo de su dilatada historia.
El verdadero misterio de la pirámide escalonada, no es de piedra, era de carne y hueso, el ya mencionado Imhotep, arquitecto, ingeniero, medico astrónomo… se supone que su tumba debe de estar cerca de la pirámide, esta se encuentra rodeada de un gran complejo en el que fueron sepultados las figuras preeminentes de la corte de Zoser, por lo que Imhotep no puede estar muy lejos, si se encontrara su tumba y lo que es más si estuviera intacta, puede que todo lo que nos preguntamos de cómo se construyeron las grandes pirámides nos fuera finalmente revelado de mano de su propio creador.
Además, en la tradición del antiguo Egipto se decía que era el portador de un libro mágico que recibió del cielo, en los antiguos escritos uno de los muchos títulos de Imhotep era el del portador de lo que el cielo trae. Incluso en la época de Tolomeo se le elevó a la categoría de Dios de la medicina y la sabiduría. Saber quién era en realidad este hombre y de dónde sacó todos sus conocimientos iluminaría de pleno esta parte de la historia humana que tenemos todavía en la oscuridad.
Imágenes cortesía de: youtube.com; elmundo.com
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