Fuente: muertos muro de berlin
Luego de la inesperada Caída del Muro de Berlín, salieron a la luz varios testimonios de personas ingeniosas que lograron sobrepasar el muro en globos de fabricación casera, túneles o coches con doble fondo; en contraparte, también se conoció de personas que intentando cruzar fallecieron en manos de las fuerzas que resguardaban el mismo.
Aun en la actualidad, no existen cifras exactas que revelen el número de personas que perdieron la vida a raíz de la sorprendente construcción del Muro de Berlín. Sin embargo según una investigación llevada a cabo por la Fundación Muro de Berlín y el Centro de Investigación de Historia Contemporánea de Potsdam, se cree que más de cien personas pertenecientes a la Republica Democrática de Alemania (RDA), para quienes estaba absolutamente prohibido atravesar el muro y aun así trataron de cruzarlo durante su existencia, murieron en el intento de superación.
La mayoría de las personas fallecidas fueron ultimadas a tiros por los soldados del régimen comunista, otros morían durante la fuga por causas indirectas (ahogados, en accidentes mortales, suicidios). Entre los personajes más sobresalientes se pueden considerar los siguientes:
Ida Siekmann: trabajaba como enfermera en Berlín; inmediatamente después de cerrar la frontera entre el este y el oeste de Berlín, numerosas familias de Bernauer Straße huían al oeste, por lo que el líder de Alemania del Este Walter Ulbricht ordenó tapar las entradas y ventanas de los edificios adyacentes ubicados en el sur de la calle, pues muchos de los residentes de tales viviendas huían por los pisos superiores siendo rescatados por el departamento de bomberos de Berlín Occidental, quienes colocaban hojas de salto abiertas para que las personas saltasen. No obstante, un día antes de cumplir 59 años, Siekmann arrojó algunas de sus pertenencias a la calle de Berlín Occidental para saltar por la ventana del cuarto piso y debido a la desesperación saltó antes de que los bomberos pudieran abrir la plataforma de salto, resultando gravemente herida al caer al suelo. Ida Siekmann murió mientras era trasladada al Hospital, convirtiéndose así en la primera víctima del Muro de Berlín.
Günter Litfin: un sastre alemán que el veinticuatro de agosto del año 1961 que planificó su escape de forma ilegal nadando por el río Spree de Humboldthafen a través de un pequeño canal que se separaba desde el río hacia el oeste en Berlín Occidental. No obstante, al atravesar el puente ferroviario que formaba parte de la frontera, este sastre fue sorprendido por oficiales de la policía, quienes lo balearon y asesinaron en el agua.
Chris Guefroy: un joven con sueños truncados por el gobierno, intentó escapar de Berlín Este a Berlín Occidental la noche del cinco al seis de febrero de 1989 por el conducto del distrito Britz, al escalar la última valla metálica del conducto, fue descubierto y atacado por las tropas de los linderos, recibiendo dos disparos en el pecho que lo hizo morir en la franja fronteriza.
Winfried Freudenberg: un gran ingeniero electrónico; quien el ocho de marzo de 1989 se estrelló con su globo casero en el barrio occidental de Zehlendorf, pues se apresuró por sacar todo el aire del globo, debido a la emoción de haber cruzado y por miedo de alcanzar el contorno adyacente que pertenecía a la ocupación soviética.
Además de estas personas, se estima que hubieron muchos más casos de personas que perdieron la vida durante y después del sometimiento a la estricta vigilancia de los soldados que resguardaban el Muro de Berlín; se cree que algunos perecieron por infartos de miocardio, debido a la presión e impotencia a la que estaban expuestos.
Sin embargo, si se evidenciaron huidas exitosas, tal es el caso de seis hombres, diez mujeres y siete niños que el cinco de diciembre de 1961, traspasaron la estación de tren berlinesa de Albrechtshof, escapando hacia la jurisdicción noroccidental de Spandau en una locomotora. Otro caso, es donde catorce habitantes de la parte oriental cruzaron un río en medio de una lluvia de balas a bordo de un barco de pasajeros. Además de esto, un grupo de cincuenta y siete personas se arrastraron por un túnel de aproximadamente ciento cincuenta metros de largo, que se encontraba bajo el muro de Berlín. Inclusive algunas personas trataron de desafiar a las leyes de la naturaleza, pues, una familia trepó por el tejado de un edificio administrativo de la RDA, adyacente al Muro escapando desde allí con un teleférico de construcción casera.
Hoy en día, la nación Alemana guarda en su memoria las víctimas mortales, aquellas personas que desesperadas por la crisis que atravesaban, en un acto de valentía perdieron la vida trágicamente tratando de huir del clima de presión al que estaban sometidos, por lo que se les rinde homenaje en una ceremonia especial realizada diariamente en la Capilla de la Reconciliación.
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