El caso es que quizá muchas estaréis pensando ya en qué os vais a poner para ese día (hoy hablaremos de las invitadas, otro día hablamos de los vestidos de novia ¿vale?) así que he pensado que os vendrían bien algunas ideas.
Lo primero que hay que tener en cuenta es el protocolo. Nunca he asistido a una ceremonia donde me indiquen el "dress code" (vamos, como tengo que vestir) pero creo que más o menos todos tenemos claros ciertos puntos. A una boda NUNCA podremos ir de blanco, champán o blanco roto, estos colores se reservan exclusivamente para la novia y tampoco de negro, es tan serio que parece que se va de funeral.
De igual modo, si la boda es por la mañana elegiremos un vestido de cóctel, pudiendo ser en vivos colores y estampados. Si la boda es por la tarde se podrá optar por un vestido largo en tonos más suaves. Punto importante: nada de medias. No hay nada más horroroso que ir monísima con un vestido de infarto y llevar medias de cristal. Para ese día nos hacemos una buena depilación y adaptamos los zapatos para que no nos rocen (otro día hablaremos de eso) y ya.
En cuanto a los complementos optaremos por bolsos joya o clutch y por zapatos de salón o sandalias con cuyo tacón nos sintamos cómodas, mi amiga Montse, de la que ya os hablé cuando vimos la moda premamá (tengo más amigas... no vayáis a creer), regaló en su boda manoletinas enrollables y vienen de fábula cuando ya no aguantas el dolor de pies, pero por si a los novios no se les ocurre es recomendable llevar un repuesto en el bolso... (no creo que en las bodas de portada de revista lo hagan, no me imagino a la Presley y su prole cambiándose de calzado pero nosotras vivimos en el mundo real ¿verdad chicas?).
Os pongo algunos ejemplos para que veáis lo que podéis encontrar ahora en cuanto a vestidos para bodas se refiere, pudiendo elegir entre vestidos cortos y largos.
¿Y vosotras? ¿tenéis alguna boda a la que asistir este año? ¿habéis pensado ya lo que os vais a poner? Dejadme vuestros comentarios y compartid con los iconos sociales.