Me resultó interesante que el edifico era muy moderno y también, su gran espacio de exhibición. En su planta baja, se puede disfrutar de una exposición sobre la evolución del vidrio desde los años sesenta hasta la actualidad. Obras de arte y objetos singulares no faltan. Como por ejemplo, una chaqueta hecha en su totalidad por piedras de cristal que podréis ver al detalle en las fotos de abajo. Además de esto, hay un montón de esculturas y cuadros de arte moderno realmente inspiradores. Pero también, objetos relacionados con el uso artístico del vidrio y hasta un estudio de lámparas al que se llega a través de una escalera que obviamente, está hecha de vidrio.
No quería olvidarme de comentaros que su sótano alberga una colección de objetos de cerámica muy interesantes. Así que si por casualidad os pasáis por esta región de Baviera, os recomiendo un montón visitarlo porque realmente merece la pena. La entrada cuesta seis euros y podéis consultar sus horarios aquí, antes de ir. Y si queréis llevaros un souvenir auténticamente alemán, tenéis que visitar su tienda donde encontraréis objetos de cristal monísimos y de uso decorativo.
¡Y eso ha sido todo por hoy! Espero que os haya gustado e inspirado. ¿Qué me decís? ¿Conocéis este museo o alguno similar? ¿Soléis visitar museos de temáticas tan singulares? ¡Espero vuestra respuesta en los comentarios!
Ya sabéis que durante los meses de verano, solo publicaré un nuevo post: viernes sí, viernes no. Sin embargo, me podéis seguir la pista en Twitter e Instagram donde seguiré compartiendo lugares con encanto de Berlín y lo que me inspira en mi día a día.