España es un país consumidor de café. Es esta quizás la bebida más solicitada en el universo de la restauración y hostelería, sin embargo, en los últimos años ha quedado evidenciado también el crecimiento de otra alternativa en el segmento, este es el de las infusiones y tés.
Si hablamos de café e infusiones para hosteleria, como los que podemos encontrar en Productos del café, hoy en día son dos de los productos más solicitados, porque a medida que pasa el tiempo, crece el número de alternativas a incluir en la carta o menú de cualquier cafetería y entonces, se torna imprescindible modernizar el catálogo de opciones, haciendo mayor hincapié incluso en tipos de infusiones que en el pasado nunca hubieran tenido lugar en un bar o restaurante.
¿No sabes qué infusiones comprar para tu negocio de hostelería? Hoy te damos el listado de las más consumidas en España, para que ofrezcas las imprescindibles en tu establecimiento.
Tipos de infusiones para tu cafetería
La búsqueda de productos más saludables ha impulsado en los españoles la necesidad de encontrar una alternativa al café. Así, el consumo de té e infusiones tanto a nivel doméstico, co mo en bares y cafeterías, ha crecido notablemente.
Este incremento puede deberse en parte a la influencia de culturas orientales o árabes, grandes consumidoras de té. También ha crecido la creencia de que el té y las infusiones serían menos perjudiciales para la salud que otras alternativas como el café. Por otro lado, las teterías se han convertido en tendencia como propiciadoras de ambientes distendidos y relajados para quienes las visitan.
Es decir que, en definitiva, el consumo de infusiones y tés ha aumentado porque hay un mercado que lo busca y necesita. Y si hay mercado, tu negocio de hostelería debería ofrecer las mejores alternativas al respecto.
Infusiones y tés más populares
Té negro
El té negro es el más popular en nuestra cultura occidental. Se consume generalmente en saquitos o también en hebras, en este último caso, su sabor y propiedades suelen estar más concentradas y por ello se presume que ofrece una mayor calidad que cualquier amante del té sabrá apreciar.
Saciante, antioxidante, bajo en calorías, pero alto en teína y por ello además de lo anterior, es también estimulante.
La temperatura ideal del agua para su preparación es de 95º C y su intensidad dependerá de la cantidad de minutos que se deje sumergido en la taza.
Té verde
El té verde también podría ser denominado el té saludable, porque es el que mayores características positivas tiene para la salud.
El té verde también puede consumirse en saquitos o en hebras. Dependiendo de la temperatura del agua y de la cantidad de tiempo que se deje reposar el saquito o las hebras en el líquido, será su intensidad. Se recomienda, de todas maneras, utilizar el agua antes de llegar a ebullición.
Es también antioxidante, depurativo, diurético y de hecho puede ofrecerse como té digestivo.
Té blanco
Es de los últimos descubrimientos. El té blanco, de acuerdo con expertos, sería el más delicioso de todos los tés.
En este caso, en lugar de utilizarse las hojas de té, se recogen los brotes más tiernos, con lo cual, se presume que, al consumirlo, se está bebiendo la parte más joven de la planta.
Se debe beber a una temperatura no mayor a los 75º C.
Té rojo
Este es el té de los emperadores. Su sabor es muy fuerte, de color rojizo y terroso. Cobró popularidad en los últimos tiempos gracias a su función quema grasa, la cual le valió su inclusión en la carta de toda cafetería. Esta bebida debe prepararse con agua a una temperatura de 95º C.
Manzanilla
Esta es la infusión digestiva por excelencia, de las más consumidas en España y desde siempre ha estado dentro de la carta en restauración. De hecho, cuando se ofrece en un menú de una cafetería suele estar dentro de la categoría “infusiones digestivas” y sirve para tratar esta clase de trastornos leves, además resulta ideal para después de las comidas.
Tilo
Otra de las populares del segmento infusiones. Es sedante y se utiliza para dormir mejor y para la digestión. Si la ofreces en tu carta, puedes incluirla dentro de la categoría infusiones digestivas.
Valeriana
De similares características al tilo, pero de mayor intensidad en sus efectos sedantes y relajantes. Debe consumirse con precaución debido a su poder sedativo.
Romero
El romero es popular por sus propiedades curativas y sus efectos positivos en torno a la circulación sanguínea.
Menta o poleo
Esta clase de infusión tiene propiedades antisépticas, antiespasmódicas y digestivas. Además, mantiene el buen aliento y es útil para tratar el catarro y la tos.
Anís verde
Otra infusión que puede ser incluida en la carta de un bar o cafetería, se trata del anís verde, que se caracteriza por ser un tónico estomacal, brinda aliento fresco y ayuda a la digestión.
¿Cómo preparar un buen té o infusión?
Antes que nada, diremos que el té que se prepara a partir de hojas, suele ser mejor que el té en bolsitas o saquitos, sin embargo, en los últimos tiempos han surgido alternativas de gran calidad en cuanto a saquitos y lo mejor sería no escatimar en este sentido y optar por las mejores opciones del mercado.
Lo más recomendable al trabajar con té, es conservar las bolsitas en botes metálicos para que no se pierdan las propiedades organolépticas del producto.
La temperatura del agua adecuada no es uniforme para todas las preparaciones, dado que hay tés o infusiones que requieren temperaturas inferiores a la media, pero como norma general, el agua debe estar entre 85-90 grados al verter sobre el té, mientras que al momento de beberlo debería estar a unos 60º C.
Antes de verter el agua caliente en la taza o tetera, se tendrá que colocar la bolsita o las hojas de té, directamente en el primer caso, y con un filtro en el segundo. Tras verter el agua, se debe tapar y dejar reposar durante cinco minutos para obtener una intensidad óptima en la infusión y conservar su aroma.
El té debe endulzarse a gusto del cliente, con azúcar, miel o con algún edulcorante. Se aconseja que la taza donde se sirva esté precalentada.
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