Hola a todos y bienvenidos un viernes más!!!!!!
La semana ha pasado volando, y aquí estamos de nuevo esperando el fin de semana, y este viene con premio porque es Carnaval.
Hoy se me ha ocurrido hablar de los juegos de mesa preferidos de mi infancia.
Ya he dicho muchas veces que en mi familia somos de estar mucho al aire libre, en verano casi no estamos en casa, supongo que tener una temperatura con poco calor nos permite salir a cualquier hora y yo soy de las de comer fuera(de playa o merendero) casi siempre. Y en invierno, ya que no hace un frío excesivo también, de hecho ayer de tarde mis hijos, después de estudiar hicieron una ruta en bici, yo no pude por los temas de la comunidad de vecinos Grrrr(este mes en teoría acabo, cruzando los dedos estoy).
Bueno, pues a pesar de estar poco en casa siempre he sido muy aficionada a los juegos de mesa.
Mi hermana y yo jugábamos después de comer o cenar, o antes de salir, para matar un poco el tiempo.
Y en las reuniones familiares o de amigos siempre había juegos de mesa, generalmente nuestros, porque llegamos a tener muchos.
Y precisamente como teníamos muchos solo os voy a poner mis preferidos, los que más usaba. Y sin más rollo empezamos.
Para empezar os diré que mi hermana y yo éramos muy fans de cartas de coches o de motos, que se jugaba diciendo la potencia, CV y demás datos y el que tenía más, o menos según lo que pedían, se quedaba la carta del otro.
Y jugábamos mucho a los barcos y al tres en raya. Es curioso porque tuvimos Hundir la flota y Conecta cuatro y preferíamos jugar con papel y boli, no sé porqué.
Y el ajedrez, damas y dominó nunca faltaban, pero ahora os diré juegos de mesa propiamente dichos.
Sorry.
Este juego nos lo regaló uno de mis tíos de sorpresa. Mis tíos son así, ven algo que les gusta y nos lo compran, sin más, y un día llegó uno de ellos con este juego porque pensó que nos gustaría. Y acertó.
Durante un verano entero estuvimos jugando después de la cena. Recuerdo que muchas veces, después de cenar, cuando llegaba mi padre de trabajar del turno de tardes, salíamos a pasear en busca de luciérnagas y hasta que llegaba mi padre y cenaba nosotras jugábamos a esto.
Y lo mejor es lo mala perdedora que es mi hermana, solo con eso ya había risas aseguradas.
Con el tiempo, y aunque lo conservamos, les compré una versión actualizada a mis hijos y también fue un éxito.
Grand National.
Este juego lo vio mi madre en el escaparate de una juguetería y le pareció muy original así que nos lo regaló.
El tema son las carreras de caballos de obstáculos(una salvajada pero entonces no se pensaba exactamente en eso aunque yo ya era antitaurina).
Lo mejor era apostar, y de nuevo ver a mi hermana perder era de lo más divertido.
También fue un juego de verano y de sobremesas.
Juegos reunidos.
Primero tuvimos los Juegos Reunidos de mi tío, de cuando era pequeño y dado el éxito nos regalaron uno pero nos gustaba más el antiguo.
Nuestros juegos preferidos eran Merienda de negros y Las escaleras.
Jugábamos por las tardes, después de hacer los deberes y generalmente con mis abuelos. Mi abuelo era tan mal perdedor como mi hermana y siempre quería más partidas de revancha,jajajajaja.
Por supuesto mis hijos tuvieron el suyo, toda infancia debe tener Juegos Reunidos.
Monopoly.
Este juego era el de las reuniones familiares o de amigos, lo importante era comprar y todos queríamos lo mismo, Lavapiés, Cean Bermúdez y Bailén, y cuando alguien lo compraba nos daba rabia, aunque tuviéramos más calles y mejores,jajajaja.
Este juego no fue de una etapa en concreto, nos acompañó siempre, y con los años yo jugaba con mi marido, con mis cuñados, amigos, y mis hijos tuvieron primero uno infantil y luego el normal.
Y a día de hoy ellos siguen jugando, hay una cafetería en Gijón que tiene juegos de mesa donde mis hijos y sus amigos van a veces en invierno y ese y el Trivial son las estrellas.
Botilde.
Confieso que como buena fan del Un, dos, tres hasta que no tuve eso y la botibota no paré. La Botibota era un artilugio que metías en el pie y giraba, es un absurdo que aún anda por la finca pero ...en fin.
El juego de mesa nos gustó mucho al principio y estuvimos enganchadas, pero fue algo efímero, y aunque recuerdo muchas risas no era como los anteriores juegos.
Intelec.
Yo tenía la versión de viaje y además de llevarlo de vacaciones nos acompañaba a la playa o a sitios así para jugar un poco después de comer. Era muy divertido y nos reíamos mucho intentando hacer colar palabras imposibles.
Y a mis hijos también se lo compré, claro.
El mago electrónico.
Cuando éramos bastante pequeñas nos fascinaba que un muñeco acertase las respuestas. Al crecer y conocer los imanes lo entendimos pero nos seguía encantando. Y a mis hijos les regalé una versión moderna muy divertida.
Enredos.
Hoy día se llama Twistter y es muy divertido. De pequeñas jugábamos en casa con mis padres algún domingo antes de cenar, y lo llevábamos a los eventos donde había más niños, y era un éxito, nos reíamos mucho.
Mis hijos tuvieron el Twistter y en las reuniones familiares juegan todos los primos y mi suegra, y ella nos gana a todos, dobla que no es normal,jejejejeje, me mata la envidia.
El imperio cobra.
Este juego nos gustaba mucho, pero era para dedicarle tiempo. A los otros les dedicábamos un ratín antes o después de salir, pero este era más largo así que buscábamos la ocasión, una tarde de mucha lluvia en la que había una merienda especial, tardes de visitas de amigos en casa, momentos así. Era muy divertido.
Sobrevive.
Este nos encantaba aunque tanto mi hermana como yo éramos tan impacientes que a mitad de juego ya estábamos cansadas porque era lento, y nosotras queríamos acabar con el contrincante rápido. Cuando jugábamos con más gente era mejor, así que de nuevo era un juego para reuniones o con mis padres.
Oca y Parchís.
Teníamos una oca que por el otro lado era el parchís y nos encantaba. Era el típico juego de después de comer, justo antes de ir a algún sitio. Entre los 8 y los 11 años jugamos un montón, y también teníamos unos modelos pequeños magnéticos para llevar de viaje, que nos acompañaban a muchos sitios.
Mis hijos los tuvieron y tienen y de vez en cuando cae alguna partidita.
Era un juego para los de casa ya que solo pueden jugar 4, aunque con la Oca hacíamos excepciones y cogíamos fichas del Sorry, por ejemplo, que tenía azul y amarilla y jugábamos más, y molaba mucho.
Bingo.
Este también me lo regaló mi tío y lo teníamos en la finca, jugábamos con mis abuelos, mis tíos abuelos, mi hermana, mis padres...yo cantaba los números y jugaba también y teníamos una caja llena de pesetas y ese era el dinero del juego.
Recuerdo muchas risas en aquellas mesas bajo los manzanos, fue una época realmente feliz. También jugábamos a las cartas con esas pesetas, usando 2 o 3 barajas.
Mis hijos también tuvieron bingo y jornadas familiares, y de cartas, con la familia de mi marido y la mía llegamos a ser más de 30 con las cartas, y algunos somos muy competitivos,jajajaja.
Bueno, pues hasta aquí el post de hoy que se me ha hecho larguísimo. Al final creo que los juegos que más felices nos hacían eran los más sencillos porque lo importante no es el juego en sí sino el momento y la compañía.
Sé que me dejo muchos imprtantes como el Trivial, pero he puesto los más frecuentes.
Antes de irme quería decir una cosa importante.
A Sandry le han robado una potrilla preciosa llamada Thalía. Eva lo explica todo aquí, por favor difundidlo a ver si logramos que aparezca que las primeras horas son vitales. No quiero ni imaginar el sufrimiento de Sandry, espero que todo se arregle.
Mil gracias por leerme y nos vemos el miércoles, me voy a tomar el puente de Carnaval de descanso porque de verdad que esta semana ha podido conmigo. Rescataré algún post de esos de hace mucho tiempo pero no publicaré. Un beso y feliz Carnaval a todos!!!!!!
¿Me decís cuales eran vuestros juegos preferidos?¿Coincidimos en alguno?
*Hoy las fotos son de Internet, si algún propietario quiere que las quite lo haré de inmediato.