Hola a todos y bienvenidos un viernes más.
Lo primero perdón por tardar en contestar a los comentarios, ya están respondidos, uffff.
Y ya que estamos en pleno verano me apetecía compartir los helados que más me gustaban cuando era pequeña, es decir, hacer un post un poco nostálgico pero a la vez alegre, que nos arranque una sonrisa.
Y sin más tardanza empezamos por una lista que no va en orden de preferencia, es muy aleatoria.
aquí) o para dar de comer a mis muñecas.
Este helado me sabe a paseos por el puerto, con ese olor a sal, cuerda y brea que apenas encontramos ya, y me sabe a conversaciones tranquilas, a ir arregladitas con nuestros vestidos iguales y a tranquilidad, lo que tiene que ser el verano para un niño.
Helado de Bombon.
Ya véis que no he encontrado una foto así que pongo todo el cartel,jejejeje.
Este me gustaba para tomar de postre, especialmente cuando estaba de vacaciones o comíamos en algún bar.
Cuando yo era pequeña todos los fines de semana hacíamos excursiones, unas veces rutas de monte, otras lugares tranquilos y otras pueblos chulos y a veces comíamos de restaurante, y este helado era uno de los elegidos de postre.
Cuando pienso en él a mi mente acuden recuerdos bonitos, mi hermana y yo jugando en unos columpios del bar después de comer, mis abuelos riéndose con nuestras ocurrencias o el olor a hierbabuena por el camino junto al río mientras yo terminaba mi helado.
Twister.
Este también me pilló más mayor. Mi hermana se comía el de hielo y yo el de choco y nata y lo comprábamos en el mismo kiosco donde comprábamos el Negrito, así que también es un helado de por la tarde, un helado que sabe a aventuras, a hablar de la serie que estuviese de moda, a planear juegos para el finde y a pedir a mi madre que nos comprase un tebeo o un sobre sorpresa, porque al final algo caía siempre,jejejeje.
La verdad es que se me ocurren algunos más pero los que más me gustaban eran estos.
Y claro, siempre hemos comido los clásicos de Verdú, Islandia o Hermanos Helio, tanto en Gijón como en Candás o algún que otro sitio, esos sí que eran ricos, mmmm, cucuruchos de dos bolas o de corte muy muy gorditos.
Y ya para acabar como curiosidad os diré que durante dos años seguidos nuestras vacaciones consistieron en recorrer Portugal de sur a norte, pueblo por pueblo, y allí los helados de Frigo eran iguales pero se llamaban Olá, y nosotras comíamos exactamente los mismos que en España. Y años desués con mis hijos seguimos comprendo esos mismos, Olá, hay cosas que no cambian.
Os pongo un cartel que me ha encantado recordar.
Y ya que estoy aquí aprovecho para preguntar si alguien recuerda un helado que venía en un vasito de plástico transparente en forma de cono, y que al final tenía una bola de chicle.
Sé que no lo he soñado, que me encantaba y lo tomaba también viendo verano azul pero por más que he buscado no he encontrado nada y me gustaría saber qué helado es. ¿A alguien le suena?
Bueno, pues hasta aquí el post de hoy, espero que os haya gustado y mil gracias por leerme y por los comentarios que intentaré responder a lo largo del finde.
Y vosotros; ¿Los conocíais?¿Los habéis probado?¿Coincidimos en alguno? Muchos besos y hasta el lunessssss.