Entrada turística: lugares diferentes y originales de Gijón

Lugares diferentes e interesantes de Gijón

Hola a todos y bienvenidos un día más. ¿Qué tal ha ido el finde? Espero que genial. El mío ha sido bastante bueno, la verdad.

Hoy vengo con un post de turismo, pero a mi manera. Los lectores habituales sabéis que mis post turísticos tienen un enfoque más personal. Opino que hay muchos blogs con información de este tipo que son buenísimos, yo solo quiero descubrir algún rincón diferente o algo que, quizás, no sea tan habitual. Y ahora, sin más rollo, empezamos.

Cuando viajo, ya sea lejos o cerca, en mi tierra o fuera de ella, me gusta visitar sitios diferentes. También voy a los lugares conocidos, claro, pero me gusta descubrir pequeños rincones que no aparecen en las guías de viaje.

Si vais a estar en Gijón en Semana Santa, o en cualquier otro momento, os recomiendo visitar parques céntricos, parques de barrios, el Parque de Isabel la Católica, el Parque de los Pericones, La senda verde del fluvial, El cabo San Lorenzo, el Cerro de Santa Catalina, Campa Torres, la senda de Peñafrancia, la Universidad laboral, los museos, los lavaderos, las esculturas, sitios especiales al aire libre o las localizaciones de cine. Pero hoy, además e todo eso, os quiero proponer unos sitios muy chulos que, además son gratuitos y es muy fácil llegar a ellos.



Placas en recuerdo de las personas enviadas durante la Guerra Civil a campos de exterminio nazi

Hay varias (34) en distintos puntos de la ciudad, al pie de las casas donde nacieron estas personas. Las encontramos, por ejemplo en la calle Hermanos Felgueroso, al final, en la calle Cabrales, llegando ya a la carretera de la costa (en la acera de la derecha si vamos a dicha carretera) y en la calle Manuel Llaneza, delante del kiosco. Es un recordatorio muy triste pero necesario, no debemos olvidar a todas esas personas que se exiliaron por motivos políticos durante la Guerra Civil y acabaron en esos terroríficos lugares.



Visita a las casas de personajes mágicos



Si vamos con niños es una visita muy especial, pero para los adultos también resulta curioso.


Aquí vive el Ratoncito Pérez
La casa de “el Ratonito Pérez” está en el parque de Isabel La Católica, la de “el Hada de los chupetes” en el parque de los Pericones (donde la calle María Moliner) y la de “Pepito grillo” en un prado en Nuevo Roces, detrás de Alimerka.


En algunos de esos rincones verdes viven seres mágicos, por ejemplo Pepito Grillo

Visita al refugio de insectos



Los tenemos repartidos por la ciudad, hay 210, y ayudan, entre otras cosas, al control de plagas. El de la foto está en el céntrico parque de Plaza de Europa, casi enfrente del museo de Nicanor Piñole, y es algo muy curioso. Me ha encantado la idea, me gusta para poner en fincas y huertos, así atraemos insectos que polinizan y otros que controlan plagas.



Pasar la tarde en un merendero



No me refiero a las áreas recreativas, con mesas, que tenemos por todas partes. Hablo de lo que aquí llamamos merenderos, unos bares con un prado en el que los niños juegan y corren, y los adultos disfrutamos del sol. Generalmente permiten llevar tu propia comida, pero tenemos que comprar allí la bebida. En la mayoría tienen cocina, y los precios son buenos y todo está muy rico. Estos días hemos tenido unas temperaturas estupendas, y terminar la tarde en uno de esos lugares que huelen a tortilla, sidrina y risas. Mis favoritos son: El cruce, El cañaveral y El rinconín de Deva, pero hay muchos y todos estupendos.



Ver a los serenos



Yo los tenía tan normalizados que no les daba importancia, pero a la gente le llama mucho la atención saber que tenemos serenos. Pues si estáis por aquí solo tenéis que salir a dar un paseo por la noche, porque seguro que os encontráis con alguno. Nosotros a menudo charlamos un rato en el paseo nocturno, ya sabéis que los perros siempre dan pie a una buena conversación.



Disfrutar de la música en directo



Hay muchas muchas opciones, por ejemplo ir los jueves a una Jam sessions en el Savoy (mis hijos participan de vez en cuando y es increíble), al Mubarak si os gusta el indi, al Patio de la favorita a más Jam sessions (también van mis hijos), además de los muchos festivales de todo tipo: festivales de coros (mis hijos también aparecen, jajaja), de musica indi, el Sound, el Txunami, Metropoli, la Semana Negra, la Semana Grande (en las dos últimas también participaron mis hijos)



En verano hay música en la calle cada día. Además de conciertos normales de artistas consagrados. Somos una ciudad de música, yo, cada mes voy varias veces a distintos actos, el pasado fui a ver a Diego Vasallo, a mis hijos y a un grupo nuevo muy chulo. Os dejo un vídeo de hace mucho tiempo, es un trocito de un concierto del grupo de mi hijo. En directo suena bien, con el móvil que tenía, en fin... El solo de mi guitarra es de mi hijo.



Ver los edificios más bonitos y originales



Nos rodea el arte modernista, en especial todo lo realizado por Manuel del Busto.



Hay edificios preciosos y llenos de curiosidades, como el de la calle Rectoría, el martillo de Cápua (donde vive un amigo de mi padre con su marido y por dentro es increíble) o el de la calle Cabrales que mi madre y yo adorábamos y os dejo aquí debajo (es de Manuel del Busto, claro).



También os recomiendo el chalet de Ladislao Menéndez, que está al lado del refugio de insectos que os enseño, y también es de Manuel del Busto, o cualquiera de la calle Instituto, San Bernardo, Plaza del Parchís, calle La Merced y aledaños.



Ir al autocine



Un planazo es cenar en un merendero y luego ir al autocine a contar estrellas. También podéis cenar allí, que hay hamburguesas, bocadillos o palomitas. La película no se elije, cada finde ponen una diferente y suele haber dos sesiones, pero por lo general son pelis actuales. En mi caso, cuando voy, no pienso demasiado en la película, me dedico a disfrutar. He visto pelis ideales y algunas bastante basura, jajajaja. Dos personas por coche pagan 10€, bastante menos que en el cine tradicional. Y si tenéis los cristales del coche sucios allí hay cubos con agua y jabón, y si llueve nos prestan unas viseras con imán para que no se moje el cristal. Han pensado en todo.



Y lo voy a dejar aquí. Si vais a venir en Semana Santa os recomiendo las procesiones, son sencillas pero realmente bonitas, independientemente de vuestras creencias. Yo no soy creyente y me gusta ir a alguna, voy variando ciudades y días, pero alguna cae. O la misa de Ramos en Los Carmelitas, cuando sacan un burro con Jesús para bendecir las palmas.

Mil gracias por leerme y nos vemos el jueves para reflexionar un poco.

Muy feliz semana a todos.