¡Hola corazones!
Después de unos días de relax por tierras belgas volvemos a la carga con un nuevo post sobre Egipto. En este post os quiero hablar de los hoteles en los que nos alojamos y de lo que hicimos el tercer día de visitas.
¡Prepara café y galletas que comenzamos!
En el Cairo nos alojamos en el Marriott Mena House. Este hotel esta ubicado en Giza, de echo desde algunas habitaciones, desde el restaurante y desde muchas zonas comunes puedes ver dos de ellas. Es un hotel impresionante, no solo por sus vistas, si no por lo enorme que es y por lo cuidado que está.
Cuando llegamos flipamos porque antes de ser un hotel, era un palacio, así que os podéis imaginar el lujo que había en el.
Tiene un restaurante buffet abierto las 24h del día y uno Italiano. Cuenta también con banco propio para que puedas cambiar dinero, servicio de correo postal y tienda de regalos.
Tengo claro que cuando vuelva a Egipto volveré a alojarme en el.
Las dos habitaciones en las que estuvimos eran bastante grandes. Con baño privado con bañera y secador. Cama de matrimonio, tv, una mesa con sillas, dos sofás y terraza con mesa y sillas.
Es un hotel que enamora nada mas entrar por la puerta.
La única cosa mala que puedo decir de el es que en el hotel buffet nos cobraron por una cena (bastante cutre) 50€. Igual aquí no parece mucho, pero en Egipto eso es mucho dinero. En cambio en el italiano por una pizza, un plato de pasta y dos coctels nos cobraron unos 25€
Después de el Cairo nos fuimos a Luxor, allí nos alojamos en el Steingenberger Nile Palace. Se encuentra a unos 15-20 mins en calesa de caballos (allí es el medio de transporte mas usado) del centro de la ciudad.
Las habitaciones están inspiradas en el antiguo Egipto y son bastante espaciosas. La nuestra tenía una terraza pequeñita, pero en esa ciudad hay tanta contaminación y polvo que no aguantamos fuera ni 5 minutos (del calor ya ni hablamos). La zona del desayuno, que está justo al lado de la piscina es super bonita, además tiene vistas al río Nilo lo que hace que tenga un encanto especial.
Para comer puedes ir al restaurante italiano o al vietnamita. Nosotros fuimos al italiano y estaba todo super rico.
Tiene un montonazo de tiendas con libros, souvenirs, joyas, ropa... genial para comprar regalos sin tener que moverte.
No es un hotelazo como el Mena House, pero estaba super bien y el personal era muy amable. Así que super recomendable también.
El siguiente sitio donde nos alojamos fue el barco, en el pasamos unas cuatro noches. Nuestro barco se llamaba Radamis II. Tenía cuatro plantas, una de ella descubierta donde se encontraba un bar con sillas y mesas y la zona de la piscina con un montón de tumbonas para ir tomando el sol mientras contemplabas el paisaje nilótico.
Además en el barco también tenían un par de tiendas. Una era una joyería (donde hicimos algunas compritas) y otra una tienda de souvenirs y chilabas. También tenía un bar enorme y un restaurante buffet.
Los camarotes no es que fueran muy grandes, pero para el tiempo que pasamos en ellos no necesitábamos mas. Lo mejor eran las vistas cuando íbamos navegando ya que teníamos una ventana que ocupaba una pared entera.
Y por último nis alojamos en el Seti Abu Simbel en Aswan. este es, sin duda alguna, el mejor hotel en el que he estado en mi vida.
Antes de ir lo había visto en fotos y me había enamorado de el, pero al llegar casi me da un infarto.
Está a 5 minutos del templo de Ramses II y la reina Nefertari (puedes ir andando si no te da una insolación antes), en medio del desierto del Sahara en un pueblito llamado Abu Simbel.
Es enooooorme y las habitaciones son como casitas individuales.
Una vez entras te encuentras una habitación a doble altura. En la parte de abajo, a la izquierda esa el baño (super grande) con bañeray secador. A mano derecha hay unos armarios enormes, caja fuerte y una mini nevera.
Una vez subes las tres escaleras que hay te encuentras, en nuestro caso, dos camas a mano izquierda y un escritorio con una tele a mano derecha. Al fondo una ventana con vistas a la terraza con una mesita de café un mini sofá.
La terraza tiene mesa y sillas y, lo mejor, vistas al lago Nasser.
Toda la habitación esta decorada con lamparas con figuras egipcias y sabanas y alfombras con estampados africanos.
El hotel tiene un bar con terraza al aire libre, una tienda de regalos, banco propio, restaurante buffet y, lo mejor, dos piscinas enormes con tumbonas y vistas al lago Nasser.
Es un hotel perdido de la mano de dios al que la gente suele ir para poder ver el espectáculo de luz y sonido de Abu Simbel (como fue nuestro caso) o a desconectar.
La verdad es que si pueda volvería y me quedaría unos cuantos días porque es tan bonito que fue pecado solo poder quedarnos uno. Es caso, pero para mi merece la pena cada euro.
Y después de esto os dejo con nuestro itinerario del tercer día de excursiones.
Ese día nos tocó madrugar para ver el templo de Karnak. Si habéis visto la película de la Momia (la vieja, no la de Tom Cruise) os suena fijo. Era un templo con el que soñaba, así que poder recorrerme sus pasillos de columnas o pasear por el paseo de esfinges que, antaño, lo unían con el templo de Luxor fue increíble.
Una vez terminamos visitamos Deir el Bahari o templo de la faraón Hatshepshut. Este templo es super bonito, pero al ir a una hora en la que hacía muchísimo calor y no tener ni una zona de sombra, casi nos da un mal. Lo vimos super rápido (de echo solo puedes verlo por fuera) porque era insoportable estar al sol. Aún así es una visita obligatoria.
Lo siguiente fue el Valle de los Reyes. Una de las visitas mas impresionantes de Egipto (aunque para mi lo fueron todas). Dentro del precio de la entrada van incluidas tres tumbas de las que están abiertas ese día. Las van variando para que no se estropeen.
Además de esas tres tumbas nosotros vimos también la de Tutankamón y la de Ramses VI.
La de Tutankamón es la mas famosa, pero para nada es la mas bonita. De echo es una de las tumbas mas pequeñas que hay en el valle. En cambio la de Ramses VI es impresionante. Tiene un pasillo enorme que va desde la entrada hasta la cámara funeraria lleno de pinturas con jeroglificos. Fue entrar y ponérseme los pelos de punta, sin palabras.
Me quedé con ganas de ver las otras dos que podían comprar a parte, pero no teníamos tiempo para todo, así que para la próxima vez.
Y ya por último, de la que íbamos de camino al barco, nos paramos en los Colosos de Memnón o templo de Amenofis III.
Son dos esculturas enoooormes del faraón Amenofis III una al lado de la otra que se hicieron famosas porque una "hablaba" debido a que en un terremoto que hubo hace muchísimos años se le hizo una grieta por la que entraba el aire y eso hacía que emitiera sonido. La gente de aquel entonces pensaba que era que estaba vivo.
Todo esto lo hicimos antes de la hora de comer (dos de la tarde mas o menos). Después tuvimos la tarde libre para tomar el sol y darnos un baño y después de la cena, sobre las 21:30h, comenzaba la fiesta de la chilaba. Una fiesta en la que todos teníamos que llevar una chilaba egipcia y había juegos, bailes y demás. La verdad es que lo pasamos super bien y aguantamos hasta las dos de la mañana, cosa que no está mal teniendo en cuenta que nos habíamos levantado a las 5:30h.
Y esto fue todo ese día. Así que ahora os dejo con las fotos.
-Camisa/Shirt: Zara
-Pantalones/Shorts: Levis 501
-Deportivas/Shoes: Converse
-Sombrero/Hat: Asos
-Bolso/Bag: Studio 16 (aquí/here)
Otro post eterno, pero como os he dicho en los anteriores (que podéis ver aquí) me es imposible hacerlos mas cortos.
Espero que os esté gustando esta "guía de Egipto" y os sea útil si pensáis viajar a ese maravilloso país.
Me despido por hoy. Espero que tengáis un día estupendo.
¡Hasta el viernes!
Espero que os haya gustado
I hope you like it
XOXO
@improvingtheangel_
Fuente: este post proviene de Improving the angel, donde puedes consultar el contenido original.
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