Una parada importante de paseo en la Antigua Grecia es Delfos, considerado el centro del mundo. Se trata de una pequeña ciudad turística ubicada en la ladera sur del monte Parnaso, que deja sin aliento a quien la visita por las sorprendentes vistas que ofrece del valle y del mar. Un paisaje único que alterna campos de almendros con bosques de pino.
Delfos ha sido considerado un antiguo centro del culto de Apolo y respetado como un lugar sagrado debido al famoso Oráculo de Delfos, el hogar de las musas.
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Delfos arqueológica
Recorrer sus calles, es perderse por completo en sus fabulosas tiendas para luego detenerse en los bares panorámicos y agarrar aliento con las vistas maravillosas del valle. El Museo Arqueológico de esta ciudad es uno de los más ricos de Grecia por su rica colección de esculturas y objetos menores donados al Oráculo de Delfos, reflejando fielmente la historia del Santuario, el cual llegó a ser el centro religioso del mundo helénico.
Se trata de 2270 metros cuadrados de exposición divididos en catorce salas, cafetería y tienda de regalos. Entre las piezas que contiene destacan la esfinge de Naxos, los Gemelos de Argos, las Danzarinas de Delfos, entre otras.
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Sus monumentos
La zona arqueológica de Delfos comprende el Templo de Apolo, descubierto en 1892 y el preferido de los turistas, el Teatro con capacidad para 5.000 espectadores y el Estadio, sede de los Juegos Píticos.
Entre las principales construcciones y monumentos que se pueden apreciar en esta localidad, destacan las Murallas de Filomena, las Rocas Fedríades, el Templo de Atenea, el Santuario de Fiulacos, la Fuente de Castalia y el Sinedrion.
Sin duda, una ciudad de encantos y bellezas antiguas ofrece hoteles y lugares de alojamiento con los servicios y comodidades necesarios para hacer de su visita una excelente estadia.
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