Por todo esto, esta pequeña zona del mundo presume de tener algunas de las mejores playas, caracterizadas por una postal fija de aguas cristalinas, arena fina y palmeras con cocos, que hacen que se constituya como uno de los destinos turísticos preferidos, sobre todo para parejas enamoradas que van a celebrar su ‘luna de miel'. Si estás planeando viajar al Caribe, hay una serie de consideraciones previas que debes tener en cuenta:
- ¿Cuándo ir?: aunque la mayoría tenemos vacaciones en agosto, éste es el peor mes por los huracanes. Este peligro se extiende de junio a noviembre, por lo que es mejor hacer antes o después el viaje en la medida de lo posible.
- Ante este riesgo, lo ideal es reservar nuestro viaje con una agencia que nos permita anular el viaje sin gastos. Saldrá un poco más caro pero prevendremos una posible mala predicción meteorológica.
- Tampoco está de más contratar un seguro de viaje, estos países pueden ser peligrosos para el turista y no es lo mismo que viajar por Europa.
- Elige un viaje concertado: seamos realistas, es una zona en vías de desarrollo, y si no estamos muy acostumbrados a movernos por el mundo, siempre es mejor hacerlo con unos mínimos de seguridad. Un crucero es una buenísima opción para disfrutar de las maravillas del Caribe sin tener que temer por nuestra integridad física.
- Busca actividades que te llenen: además de tomar el sol y disfrutar de los paisajes caribeños, existen miles de actividades relacionadas para no perderte ni un ápice de la peculiar cultura de estos países: rutas gastronómicas, submarinismo, visitas guiadas por lugares históricos... Que viajemos a la costa no quiere decir que no pueda ser un viaje cultural.
