En torno al centro histórico de la cuidad de Damasco se halla una impresionante muralla romana, de la cual se conservan un total de ocho majestuosas puertas. Este inigualable marco acoge en su interior la mezquita de los Omeyas, una de las más destacadas y prestigiosas de su género, construida en el año 705 de nuestra era.
Como sucede a lo largo de toda la cuidad de Damasco, debido al paso de numerosos imperios, en ella se dan cita muestras de arte procedentes de varias culturas, desde la griega hasta la bizantina, pasando por la romana. Es una de las mayores representaciones de la arquitectura islámica. En su interior, existe una tumba, en la cual se cree que halla el cuerpo de San Juan Bautista.
La llamada 'Via recta' es un antiguo camino romano de una longitud de 1500 metros, el cual acoge actualmente el zoco Midhat Pasha y la calle Bab Sharqui. Algunas de mejores ruinas de este imperio reposan en Damasco, como por ejemplo la Puerta del templo de Júpiter, en donde hoy se encuentra la mezquita.
El Museo Nacional es otra joya que no podemos pasar por alto. En su interior se recogen una impresionante colección de arte de todo tipo, desde cámaras mortuorias hasta representaciones del Antiguo Testamento pasando por lienzos y esculturas. El convento de Nuestra Señora y el Palacio Al Azem, son otras muestras de enorme valor, en esta ocasión, arquitectónico.
¿Y tú, conoces Damasco? ¿Qué destacarías?
Rafa http://www.micamara.es/Flickr