Desde que Internet se ha convertido en un medio más de ocio para muchos, conocer gente de esta manera se ha vuelto muy habitual. Si antes era una auténtica rareza, hoy no está mal visto hacer amigos, encontrar quien te asesore con un tema especifico, conseguir contactos profesionales, comprar y vender, e incluso ligar.
El fenómeno de las redes sociales, puede así, crear una comunidad de amigos virtuales o reales. Hombres y mujeres de entre 30 y 65 lo usan sin problemas, más ellos que ellas.
Se trata de gente que quiere conocer a otra con sus aficiones, que no tiene tiempo para hacerlo de manera tradicional, que son más tímidos o con gustos 'particulares'. Hay ya tantos portales como tipos de ligues, objetivos y clases de afinidades.
Existen webs para encuentros meramente casuales, para noches de pasión, para hallar pareja estable, aventuras, amistades, sin importar tu orientación sexual. Los más comunes son match, meetic, e incluso a través de Facebook, que ofrece enlaces hacia esta clase de webs (gratuitas y de pago)
Se puede hacer un test de compatibilidad en una página genérica y chatear, o ir a sitios ‘concretos’: si eres gótico o punk puedes dirigirte a gothic match o punk match. Si te gustan los zombies se debe echar un ojo a Zombie Harmony, o si eres un adorador de los gatos a purrsonal.com.
Entre otras webs ‘especiales’, hay sitios de contactos para amantes de la tecnología como Geek 2 geek, para treckies como Treck Passions o para gente que le guste disfrazarse de animales como pounced.org. Si se quiere compartir la afición a la marihuana existe 420dating o si se es amigo de los tatuajes se puede visitar Tattoo ed Singles.
Incluso la gente con algún problema especifico puede encontrar ‘agencias’ virtuales especificas sin tener que enfrentarse a ese cara a cara inicial o tener que ocultar el tema ‘conflictivo’. Operaciones, deficiencias, antecedentes penales, enfermedades, no son ninguna barrera para tener pareja en estos tiempos 2.0.
Sin embargo los expertos recomiendan que si hay chispa entre usuarios no se demore el momento de la cita real ya que se pueden crear imágenes idealizadas o irreales de la otra persona.