El Born
En el epicentro del barrio me encuentro con la basílica gótica de Santa María del Mar, construida como muestra del poder económico de los habitantes del nuevo distrito. Es más apacible y se trata de un distrito comercial considerablemente más dinámico, aunque me veo libre al moverme entre calle y calle, en tanto que hay un montón de pequeños restaurantes próximos, del mismo modo que las calles son muy angostas y las plazas me pueden ofrecer muchas terrazas... las cuales además, en la temporada de verano y cualquier hora del día o de la noche, se hallan llenas.
Cuenta mi guía y amigo, que tras la demolición de la fortaleza del actual parque de la Ciudadela, se abrieron nuevas posibilidades urbanísticas en el Distrito de la Ribera, lo que permitió la construcción de un, muy necesario mercado, que se conoció como Mercat del Born, proyectado entre los años 1874 y 1876 por el arquitecto Josep Fontserè i Mestre. Gracias a sus 5 áreas, el born Centre Cultural es capaz de albergar dos exposiciones al tiempo y permitir desarrollar todo tipo de actividades, tanto lúdicas como culturales.
Flanqueado por un lado gracias al viejo mercado del born y por el otro extremo, por la iglesia de Santa María del Mar, el pasaje del born todavía sostiene reminiscencias medievales que se palpan entre las terrazas de los bares de moda. Si dejamos por un momento todo lo turístico y lo moderno y centrándonos en lo histórico se puede destacar que no se sabe con precisión de donde proviene la palabra born”; una teoría defiende que significa plaza” y que bornar” es pasear por una plaza, mas los detractores afirman que es extrañísimo que habiendo tantas plazas en Barna solo esta reciba este nombre.
Esto es el Born, aquí os espero.