La original Star Wars de 1977 puede figurar hoy en día en el puesto 56 de las películas más taquilleras de la historia pero si se ajustan los números con la inflación de cuatro décadas sería la segunda película más taquillera hasta la fecha. Solo por detrás de Gone with the wind (1939) y muy por delante de Avatar (2009), por ejemplo.
Es solo un ejemplo de los sólidos cimientos de la franquicia Star Wars, la propiedad que estableció el canon al que aspira toda media franchise desde que en 1975 George Lucas firmara el mejor acuerdo posible con 20th Century Fox. Lucas conservaba la propiedad Star Wars, retenía los derechos de merchandising y se garantizaba un 40% de los ingresos en taquilla a cambio de renunciar a una parte importante de su salario. Fox, obviamente, no creía demasiado en la película a pesar de estar financiándola. Uno de esos errores de juicio que hacen historia.
Sobre esa decisión Lucas pudo edificar una franquicia de medios que ha moldeado Hollywood a su imagen durante décadas. No sólo por los números obtenidos en taquilla sino por todos los negocios que fructificaron en torno a las películas. Buscando sobre el tema me he encontrado el Instituto de investigación Statistic Brain.
A Statistic Brain le gustar poner números a las cosas y entre cientos de estadísticas de lo más variopinto tienen tiempo para Star Wars. En su web puede encontrarse una página actualizada con el dinero que ha generado Star Wars y sus ubicuas líneas de negocio a lo largo de las décadas. He convertido los datos en gráficos para hacerlo más digerible.
¿De cuanto hablamos? Más de 28.000 millones de dólares sumando todas las vías de explotación en 38 años. La taquilla cinematográfica queda relegada a la tercera posición del ranking de ingresos y los juguetes constituyen lo más importante del negocio Star Wars.
Si representamos el imperio Star Wars como una pirámide, está claro cuales son los cimientos.
El desglose de los ingresos por juguetes demuestra como el fenómeno se ha ido consolidando con las décadas.
Esto no es nuevo pero viene al caso. La taquilla de Star Wars por películas. La inclusión de Episodio VIII: El despertar de la Fuerza se debe a las ventas de entradas en las primeras 48 horas de preventa hace unos días.
Desglose de los ingresos en formatos domésticos. El DVD es el Rey.
Y más, y más y más.
Todas estas cifras vuelven a confirmar que Disney tiene entre manos una auténtica mina de hora con la que dar por bien empleados los más de 3.000 millones de euros que pago a George Lucas por ella.
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