Hacer una escapada no siempre tiene que salirse de nuestro presupuesto. Aquí tienes algunos buenos consejos que te ayudarán a economizar tus viajes es decir gastar lo necesario y disfrutar al 100% de ese lugar que te hace tanta ilusión visitar.
Antelación: Lo que hacen muchos y lo que debes hacer para poder economizar tus viajes sobre todo para el transporte, y más si lo hacemos el tren de alta velocidad, donde hay verdaderos descuentos si reservamos al menos dos semanas antes, o en avión, ya que las compañías low cost suelen ir subiendo sus precios día a día según nos acercamos a la fecha de salida del vuelo.
Reserva por Internet: curiosamente para viajar es una de las compras en la que antes nos hemos acostumbrado a utilizar únicamente Internet. Al no haber gestiones intermedias se economizan muchísimo los costes, además de ser más rápido también el proceso de compra. Asimismo, hoy en día, existen multitud de buscadores de vuelos o de alojamiento que nos permiten comparar y adquirir el que mejor se adapte a nuestras necesidades con todo lujo de detalles y de forma totalmente gratuita.
Si viajas en coche: revisa todos los parámetros que te permitirán ahorrar como el estado de los neumáticos, asegurándote de una presión ideal. Asimismo, infórmate del precio del combustible, ya que puede ser más económico en tu ciudad de origen que en tu destino. Llena todo lo que puedas en el sitio más barato. Tampoco olvides informarte sobre los peajes e investigar opciones secundarias que quizá merezcan más la pena.
Ofertas de alojamiento: a todos nos gustan los hoteles baratos, pero si queremos ahorrar, debemos ser realistas y escoger algo ‘decente’ pero que se adapte a nuestro bolsillo. Afortunadamente hoy existen muchísima oferta de buena calidad en el centro de las ciudades, eso sí, deberemos pensar cuánto nos incomoda dormir en una habitación compartida o no disponer de baño propio para nuestros días de visita. Reservar con tiempo suficiente es también vital si no queremos que se suba demasiado el precio por noche.
Renuncia al desayuno o la comida en el hotel: a no ser que te guste comer mucho, estos precios suelen ser siempre desorbitados. Además, ?acaso no hay nada más bonito cuando viajamos que salir y descubrir los bares y restaurantes de la ciudad y hacer turismo gastronómico?
Utiliza el transporte público y muévete a pie todo lo que puedas: sobre todo en las grandes ciudades europeas, el transporte en taxi e incluso en autobús o metro pueden suponer un incremento considerable en nuestra factura total. No hay nada como pasear por la ciudad o alquilar una bicicleta si tenemos tiempo suficiente. Asimismo, busca antes de ir la manera más económica de trasladarte del aeropuerto o estación a tu lugar de hospedaje. !No te dejes seducir por las compañías de taxis que suelen operar en las terminales, porque son realmente caras!
Cuidado con dónde comes: muchas ciudades, sobre todo de países menos desarrollados, aprovechan que el visitante no conoce el idioma o la región para aplicarle un impuesto particular. Para evitar que te timen, pregunta bien los precios y el IVA antes de sentarte a comer.
Salidas nocturnas: aprovecha las promociones de ‘Happy hour’ que existen en muchos bares para probar la noche de tu ciudad de destino.
Y también ándate con ojo en los mercadillos: regatear es un arte que no todos conocemos. Aunque te cueste, piensa que en este tipo de establecimientos ellos siempre son más experimentados que tú en el regateo, por lo que no dudes en rebajar el precio sin ningún tipo de complejos, están acostumbrados a este juego.
Sé comedido en tus compras: a menudo nos dejamos enganchar por recuerdos y suvenires que luego suelen acabar en el cubo de la basura. No es cuestión de no permitirte nada, ni de ser un tacaño con tus seres queridos, pero sé realista y compra lo justo.
Cuidado con las excursiones y guías turísticas: son cómodas y educativas, pero si no dispones de mucho dinero, siempre puedes hacerte tú tu propia ruta. En Internet seguro que encuentras multitud de ideas, pero también hazte con una buena guía antes de partir, de ahí puedes sacar todo lo que necesitas y más.
Dinero en efectivo: si vas a un país con otra moneda trata de hacer un balance de lo que necesitas y cambia el dinero antes de salir de tu país. Si luego te faltase efectivo, mejor pagar con VISA si se puede que sacar dinero, ya que las comisiones para esta operación suelen ser bastante elevadas.