En Vivienda Saludable ya te hemos asesorado para montar tu propia barbacoa en el jardín de casa, pero para que la ocasión sea redonda hay que tener en cuenta otros factores, como su limpieza o la normativa vigente respecto a su celebración. Sin olvidarnos de que una barbacoa no es sinónimo de perjuicio para nuestro sistema digestivo y nuestro organismo. Toma nota de estos prácticos consejos.
Consejos para que sea saludable
- Evita el quemado o chamuscado excesivo de los alimentos, ya que podría sumar sustancias perjudiciales para el organismo como las aminas heterocíclicas, clasificadas como probables/posibles carcinógenos para el ser humano.- Incluye más pescados, en lugar de tanta carne. Desde unas brochetas de rape o unas brochetas de salmón que sorprenderán a todos con su intenso sabor tras el paso por las brasas, hasta marcarte unos espetos malagueños, o una deliciosa parrillada de mariscos.
- Pásate al verde: las verduras son un tipo de alimento que, cocinado en la barbacoa, es de lo más apetecible. Prueba a crear una brocheta con las hortalizas que más te gusten.
- Menos sal y más hierbas y especias. Para dar sabor a nuestros platos podemos usar hierbas, especias y condimentos varios que añaden nutrientes y antioxidantes a la mesa.
Normativa sobre hacer barbacoas en casa
- No existe una ley estatal que prohíba hacer barbacoas en espacios privados. Sin embargo, conviene estar informado sobre ordenanzas municipales que restrinjan su uso y el reglamento interno si resides en una comunidad de vecinos.- Independientemente de donde residas, debes prestar especial atención al artículo 7.2 de la Ley de Propiedad Horizontal, que regula las actividades molestas o peligrosas: “Al propietario y al ocupante del piso o local no les está permitido desarrollar en él o en el resto del inmueble actividades prohibidas en los estatutos, que resulten dañosas para la finca o que contravengan las disposiciones generales sobre actividades molestas, insalubres, nocivas, peligrosas o ilícitas”. Es decir, los vecinos de la comunidad pueden quejarse por el olor o el humo que desprende una barbacoa y emitir una queja al presidente si repites de forma reiterada esta actividad.
- Recuerda que, si quieres instalar una barbacoa fija, deberás contar con el apoyo de la comunidad, puesto que supondría una modificación del edificio. Además, tendrás que instalar un sistema de evacuación de humos.
- Si vives en un piso con terraza o balcón amplio para realizar barbacoas, la barbacoa que emplees debe ser portátil.
Cómo limpiar la barbacoa
- Si es una barbacoa de carbón, cuando aún esté caliente la parrilla, debes retirar con un cepillo metálico los trozos de comida carbonizada que se hayan quedado pegados. Una vez se hayan enfriado las cenizas, elimínalos con un limpiador quitagrasas (dejar actuar entre 5 y 10 minutos). A continuación, si todavía hay cualquier rastro de ceniza, vierte agua caliente en la barbacoa y con la ayuda del cepillo retira los restos de cenizas. Después, aplica el mismo producto quitagrasas por toda la barbacoa, y con un poco de jabón y agua caliente limpia todo el exterior.- Si es una barbacoa de gas, debes quemar el exceso de comida y grasa que se haya podido quedar pegado. Para ello, basta con encender la barbacoa durante un periodo de tiempo para quemar todos los residuos de comida. Después, limpia las rejillas de la parrilla y rasca con el cepillo para retirar todos los restos de grasa o de alimento. Finalmente, para limpiar la parte exterior de la tapa y la cuba debes utilizar agua y algún producto tipo lavavajillas.
- Es recomendable fregar la parrilla con agua caliente y jabón al menos una vez al mes. Para ello, déjalas en remojo en agua jabonosa y caliente durante una hora, enjuágala y usa el cepillo para eliminar los residuos.
Seguro que con estas recomendaciones, la próxima barbacoa será todo un éxito y tus amigos y familia querrán repetir muy pronto.