1. Las mil cascadas de Plitvice
Ubicado en Croacia, el Parque Nacional de Plitvice es el más grande de este destino europeo, y el más antiguo del sudeste del continente. No obstante, es también un parque poco conocido que cuenta con centenares de cascadas, lagos y cuevas que se van sucediendo. En verano, las parejas hacen largas caminatas por sus senderos y puentes colgantes. La experiencia de recorrer las cascadas de Plitvice es verdaderamente única en el mundo.
2. El estanque caliente sangriento en Japón
Beppu es una de las ciudades balnearias del Japón, y a su alrededor encontramos una amplia variedad de aguas termales. Son muy visitadas tanto por los locales como por los visitantes de diferentes partes del mapa. Dentro de estas aguas termales, el estanque caliente sangriento se ha convertido en una de las grandes joyas turísticas. El agua toma un color rojo parecido al de la sangre por la gran concentración de hierro. Nadie se mete en este estanque, pero es un atractivo al que le sacan fotos en todo momento.
3. La cueva de los cristales en México
En la localidad de Naica, estado de Chihuahua, la cueva de los cristales es una de las más extrañas del mundo. Posee los cristales naturales más grandes jamás encontrados en el mundo, formados por selenita. El más grande tiene 12 metros de largo y 4 de diámetro, y se estima que su peso ronda las 55 toneladas. La cueva en su interior es muy caliente, con temperaturas que alcanzan los 58ºc, y una humedad relativa del 90 al 99%. Por eso no ha sido explorada en su totalidad. Sin el equipamiento necesario, una persona solamente puede estar dentro de la cueva por 10 minutos. Además, fue descubierta en el año 2000 así que representa un hallazgo bastante reciente.
Si estás pensando en unas vacaciones diferentes, aquí tienes tres recomendaciones de destinos extraños y misteriosos para conocer una faceta diferente de nuestro planeta. Dejando de lado los clásicos destinos de playa y de nieve, hay otros secretos por descubrir.