El diseño de producción es sencillo, por lo que a diferencia de otras series, no nos entrará pro los ojos, será la narración lo que nos enganche gracias a la intriga mayúscula alrededor de la que gira toda la historia mientras conocemos las motivaciones, en mayor o menor medida, de los diferentes personajes que forman las piezas del puzzle psicológico que debemos resolver. Esto no sería posible sin un reparto lleno de buenas actuaciones, y aunque Biel se desenvuelve bastante bien y copa el protagonismo, es Pullman quien más brilla en una serie, no tan mini, ya que se avecina una segunda temporada.
Mi puntuación: 7/10