Autor: Javier Moreno.
Editorial: Lengua de trapo.
Portada:
Resumen: Esto no es un libro. Esto, como se anuncia desde el mismo título, es un alma. Pero un alma, no se equivoquen, no es nada del otro mundo. Es un conglomerado de imágenes y palabras, datos reproducibles a disposición de cualquiera, para satisfacción del democrático instinto mefistofélico (¿quién no ha deseado alguna vez poseer un alma ajena?). Esta novela habla de aquello que estamos -?o no- dispuestos a compartir. Quizá no sepamos todavía qué es la intimidad, quizá la intimidad era otra cosa, tal vez el negativo de nuestra imagen. Es posible que la única intimidad que quede a nuestra disposición sea la de las palabras.
Este libro es también una pregunta y una ? -posible- respuesta. ¿Merece la pena seguir escribiendo ficción en un mundo instalado definitivamente en ella? Tal vez la anécdota y el detalle casi imperceptible sean un camino; precisamente aquello que nunca figuraría en una biografía al uso. Pero, sobre todo, esta novela busca el punto siempre inestable en el que lo biográfico se transforma en ficción. El lector, improvisado entomólogo, tendrá el privilegio de asistir a la metamorfosis.
Resumen y opinión personal de Chicka Lit: Llevo leído aproximadamente un 25% del libro y aún no he encontrado el argumento y ésto tiene su explicación. En la sinopsis nos dice que no se trata de un libro si no de un alma propiamente dicha. Pues bien, tenemos ante nosotros un escrito que no es una novela, ni un ensayo, tampoco es teatro ni un guión de cine. Es como leer un diario, adentrarse en la mente, el alma y/o el pensamiento de una persona. Nos cuenta sus gustos, aficiones, pensamientos, aquéllo que comprende, lo que le llama la atención y lo que no soporta. Datos que recuerda, anécdotas de cuando era pequeño y fragmentos muy breves de algo que quiere resaltar. Es un conjunto extraño de pensamientos volando en un alma, por ello es tan difícil de resumir, sin embargo estoy dispuesta a intentarlo.
Nos habla de Eduardo y María, dos personajes dibujados a base de pequeñas pinceladas, no se centra en una línea argumental narrativa como a las que estamos acostumbrados los lectores habituales de novelas. Nos habla de qué piensan, qué cosas les gustan y qué hechos han vivido, sin explicar demasiado ninguno de ellos. Estoy ante una obra muy singular, que, aunque de entrada no me ha dado una buena primera impresión es como esas imágenes de crímenes que no puedes dejar de mirar. El arte no tiene porqué ser bello y la literatura tampoco. No me gusta, pero eso no significa que no me interese. Es extraño. Me gustaría terminar de leerlo, por lo que lo tomaré en pequeñas dosis. Por lo pronto, hoy he tenido suficiente con 35 páginas. No sé si he elegido bien la lectura para esta época de exámenes previos a Navidad pero aquí estoy, sigo buscándole el sentido al libro, el argumento e intento extraer aquéllo que me gusta, en ocasiones sin mucho éxito.
...días después...
A 30 páginas de terminar de leer lo que, según la contraportada no es "un libro"... estoy totalmente de acuerdo. Es el autorretrato, la autobiografía más extraña que he tenido delante en toda mi vida. Es un conjunto de pensamientos, ideas y experiencias que no sabría cómo seguir definiendo, así que, dejaré que seáis los demás quiénes juzguéis ¿qué os parece?
Y finalmente, termino el libro tal y como me esperaba, más o menos igual que cuando lo empecé, con dudas, preguntas en mi cabeza y una expresión en mi cara que no sabría definir. Si se trataba de una crítica al formato de los libros, lo ha conseguido.