Sophie Kinsella
Querida Sophie Kinsella:
No le extrañará que le escriba justo después de haber terminado la saga. Quisiera decirle que me entristece muchísimo que no haya otra parte más, otra locura de Becky. No soporto no ver a Minnie crecer ¿Tendrá finalmente un primito? ¿Y qué pasa con la madre de Luke? No tienes piedad al dejarme así. Han sido seis libros maravillosos de una de mis sagas preferidas y ahora tengo que vivir sabiendo que no habrá más. Ojalá me sorprenda.
Sinopsis:
Becky Brandon —la compradora compulsiva más famosa del mundo— creía que la maternidad sería pan comido, y que tener una hija —una compañera con quien ir de compras para toda la vida— era un sueño hecho realidad. Pero la realidad resulta ser caprichosa... A la tierna edad de dos años, Minnie tiene un enfoque muy diferente del placer de ir de tiendas. Para empezar, demuestra una notable habilidad para sembrar el caos en cualquier sitio, especialmente en los grandes almacenes más selectos. Su palabra favorita es mío y si se queda sola frente al ordenador puede llegar a comprar dieciséis abrigos de la misma talla aporreando el teclado furtivamente. Entonces, en el entorno familiar cunde la alarma: Minnie está a punto de convertirse en una loca-por-las-compras en versión reducida. Y por si esto no fuera suficiente, la crisis financiera mundial hace que la gente se vea obligada a recortar gastos, algo que, ay, afecta muy especialmente a los clientes de Becky. Además, Becky y su marido siguen viviendo en casa de los padres de ella, circunstancia que Becky está dispuesta a cambiar al precio que sea. No obstante, y ante tantos nubarrones en el horizonte que impiden que sus sueños acaben de cumplirse de una vez, Becky decide animar a todo el mundo organizando una gran fiesta sorpresa de cumpleaños para Luke. Y es entonces cuando las cosas se complican realmente.
Kinsella siempre es un acierto. Suerte que ya tengo otros dos libros suyos esperando ser leídos. Sin embargo, sé perfectamente que no será lo mismo. Ya no habrá más Becky. No te haces una idea de cuánto me he podido reír. Es uno de esos personajes que para nada querrías tener en tu vida real porque seguro que te arruina ¡literalmente! pero en tu vida literaria la necesitas como el agua.
Esta reseña suena a despedida porque así es como me he sentido al terminar el libro. Había retrasado mucho su lectura precisamente por esto. Porque sabía que me encantaría pero a la vez sería diferente a las ocasiones anteriores ¡ya no hay más loca por las compras! Después de los primeros libros no sabía cómo se superaría y lo seguía consiguiendo. Evidentemente es ficción, que a nadie se le ocurra imitar a la protagonista, está como un cencerro. Pero tiene tan buen fondo que siempre está bien rodeada.
Eso sí, por favor, la película no le hace justicia, apenas refleja el primer libro y, aunque la versión audiovisual me gusta, se tomaron tantas licencias que para mí es la marca blanca de la serie. Por favor, Kinsella, si se apiada de mí y no lo descarto, redacte usted una séptima parte. Aunque todas sabemos que nunca será el final, siempre querremos más. A los que aún no habéis empezado a leer y no conocéis a Rebecca, no sé a qué estáis esperando... tenéis por delante seis libros fabulosos con los que reír y emocionaros. ¡Feliz lectura!