Amy Engel
Querido diario:
Quiero dar las gracias a la editorial Megustaleer por este ejemplar.
Sinopsis:
En una empobrecida zona de los montes Ozark, en Misuri, en un pueblo pequeño con grandes secretos, dos niñas de doce años aparecen asesinadas. Sin nada que perder y rota de dolor, Eve Taggert se lanza a averiguar qué le ocurrió realmente a su hija.
Eve conoce el lado oscuro de la vida. Su propia madre se encargó de enseñárselo. Una dura lección que ella ha tratado desesperadamente de evitar a su pequeña Junie. Pero, contra todos sus instintos, quizá Eve necesite recurrir a la cruel fortaleza que le inculcó su madre para afrontar la verdad sobre el crimen... y sobre su auténtica naturaleza.
Una historia poderosa y afilada sobre lazos familiares, sobre mujeres que luchan en circunstancias extremas y sobre cómo incluso los lugares más oscuros y aterradores pueden ofrecerte el refugio del hogar.
Este libro es duro, cruel y muy real. ¡Me ha encantado! rara vez comienzo una reseña diciendo que un libro me gusta o no, pero este tipo de historias me llenan tanto que se me dispara algo en mi interior. Desde el primer momento pensé que era un thriller más, una historia de desapariciones, asesinatos, investigaciones, pistas y la resolución de un caso. Pero aquí hay mucho más. El contexto en el que se mueve esta novela es tan importante o más que la premisa.
Esta es la historia de una familia rota, no porque sea la típica familia que lo tenía todo y de repente se lo arrebatan sino todo lo contrario, es la historia de alguien que ha luchado para que su hija tuviera un futuro diferente y antes siquiera de haber empezado su juventud, alguien ha decidido que todo por lo que ha trabajado no ha servido absolutamente de nada y entonces la trama se impregna de ira, rabia y dolor. La hacen única y la diferencian de muchos otros thrillers que no están mal pero quizás no sean tan humanos como este.
Cierto es que te desgarra y no te deja un buen cuerpo. El crimen en sí poco secreto tiene, pero la familia, esa madre coraje y la sociedad en la que le ha tocado vivir, su pasado, la lucha constante a la que se ve obligada para poder sobrevivir, hacen de este libro un conjunto de muchas temáticas que funcionan mediante ese hilo conductor que es la muerte y que pone de manifiesto lo que es realmente importante, cómo viven las personas y cómo mueren, lo que es justo y lo que no. Creo que pocos thrillers me han hecho pensar tanto en tan poquitas páginas. No me esperaba que tuviera este trasfondo y que la protagonista tuviera tanta fuerza. Esto le ha sumado un valor añadido.
Me ha gustado mucho el pulso de la novela, su intensidad, el horror, cómo trata las emociones su autora y sin duda el mayor acierto ha sido el uso que ha hecho del vínculo madre-hija que estoy segura de que muchas entenderán hasta incluso mejor que yo. ¿La recomendaría? Si te gustan los libros que te hacen sufrir con este género, desde luego que sí. Si estás buscando finales felices te recuerdo que la premisa de la contraportada ya te anuncia la muerte de una hija, quizás debas abstenerte. ¡Tú decides! Estómagos de acero, allá vamos.
Fuente: este post proviene de Diario de una Chicka Lit, donde puedes consultar el contenido original.
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