¿Regresarías a casa de tus papás? 4 chicas nos cuentan qué hicieron al terminar con su EX

Irse de la casa no es cosa sencilla, pero regresar lo es, todavía menos. En estos tiempos del “si te vas, ya no regresas”, cuatro chicas nos contaron su experiencia sobre cómo regresaron a vivir a casa de sus padres (o al menos consideraron hacerlo) cuando terminaron una relación de años con quien decidieron vivir.

 



 

 

Sandy:

 

"Bueno, cuando terminé mi relación, tuve que salirme del departamento donde vivía con mi ex. No podía regresar a casa de mis padres, porque en primer lugar se habían mudado a un lugar más pequeño y mi mamá había ocupado el cuarto extra con su amada máquina de coser.

 

Pedí asilo en casa de una amiga, que vivía con su novia, otro roommate y María Félix, un perro, sí macho, que me odiaba. No había un cuarto para mí, así que pase unos cuantos meses durmiendo en la sala en lo que había quedado del sillón de tres plazas pues María Félix lo había devorado.

 

Lo de mi rompimiento, creo ni siquiera me dolió a comparación de tener que despertar al cuarto para las 7 diario, antes de que el roommate de mi amiga, abriera su cuarto y María Félix saliera corriendo a tratar de hacer conmigo lo que hizo con el sillón. Antes de eso tenía el sueño más pesado, mi espalda estaba más recta y me enamoraba más fácil, así que no todo fue malo, estoy lista para estar en un campo de batalla, como vigía o relevando la guardia nocturna. Gracias María Félix".

 

Ale:

"Hace cinco años llegué a vivir a la CDMX y decidí que mi mejor opción era vivir con una tía que vivía sola. Pasaron tres años y comencé una relación. Al año me fui a vivir con él porque era el amor de mi vida (otro más a mi lista de “amores de mi vida”). Era la primera vez que vivía con una pareja. De un inicio mi relación no iba tan bien, “estiramos” a más no poder, pero no fue suficiente. Hace un mes terminé con él y como vivíamos en su departamento, la que tenía que agarrar sus cosas e irse era yo. Y así lo hice. Como el perro arrepentido regresé a casa de mi tía. Crash mi corazón, me dio directo en el ego".

 

Denisse:

"Cuando todo terminó después de vivir juntos 5 años, yo decidí mudarme y, aunque consideré regresar a casa de mis papás (que me quedaba a unas cuadras de distancia) sentí como si fuera un fracaso. No me iba a sentir cómoda retomando la dinámica de tener que dar explicaciones, y mi antiguo cuarto ya estaba tomado por mi hermano, así que busqué un departamento compartido con otros 3 roomies, pero no me sentí cómoda al final, así que sólo duré 2 meses y me mudé con una amiga que también estaba pasando por una ruptura. Ya estoy más estable, pero ha sido difícil adaptarme a la nueva vida".

 

Elo:

"Yo vivía enamorada, y era ese enamoramiento que te hace actuar como una idiota. Entonces, desafiando a mi familia, me fui a vivir con mi ex novio. A la casa de su mamá (facepalm), por tres meses. Fue un momento terrible con mi familia. Mi hermano me dejó de hablar por un mes, mi papá y yo peleábamos mucho, mi hermana ya no quería saber más de ese drama... Y aun así, lo hice. Recuerdo perfectamente que cuando él me dijo: "tal vez deberías considerarlo bien", solo pude decirle "no me des la espalda ahora". Yo realmente tenía fe en que funcionaría.

 

 En ese momento, estaba buscando estaba buscando depa para que nos mudáramos, pero él no tenía un trabajo. El primer mes no estuvo mal, pero para el tercero, me di cuenta de que estaba saliendo con su ex novia; entonces vi sus mensajes, y eso fue el detonante. Me sentí tonta. Sufrí muchísimo. Cuando le dije que, si quería que me fuera, dijo que sí.

 

Todo pasó como a mitad de semana y aunque comencé a recoger mis cosas, me esperé hasta el sábado para hacer la terrible llamada; tenía la esperanza de que él me pidiera que me quedara.

 

Tenía que enfrentarme a mi padre. Estoy casi segura de que dije: "Papá, me aceptas de vuelta", con un nudo en la garganta y la cola entre las patas. "¿Pueden venir por mí y ayudarme con mis cosas?" Y después de unas horas, ahí estaban mi hermano y mi papá. Y me llevaron a casa y alguna noche que lloré, mi papá me consoló. Las puertas de mi casa nunca estuvieron (ni estarán, lo sé bien) cerradas para mí, pero lo duro fue saber y reconocer que lo hice todo mal, que no solo sufrí yo, sino también mis papás y haber fracasado en algo que yo deseaba tanto".

 

 



 

Y así terminan estas tristes historias, si has pasado por algo así, cuéntanos cómo lo superaste, qué hiciste y qué no harías aunque estuvieras de nuevo en la misma situación. 

Fuente: este post proviene de Blog de Actitudfem, donde puedes consultar el contenido original.
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Creado:
¿Qué te ha parecido esta idea?

Esta idea proviene de:

Y estas son sus últimas ideas publicadas:

Se ven increíble, son cómodos y pareciera que a todas nos queda, pero por alguna razón, cuando lo intentas no tienes idea de con qué usar botines. ¿Te pasa? Descuida, no eres la única. Por eso pre ...

Etiquetas:

Recomendamos