A partir de ese momento, Logroño se convirtió en una villa que prosperó económica, social y comercialmente, para poder llegar a ser uno de los lugares de referencia para la industria vinícola en España. La capital riojana posee un sinfín de lugares, monumentos y museos que ver en Logroño, recorriendo sus sinuosas calles y disfrutando de la gastronomía local. En ciudades de este estilo, es recomendable realizar un free tour en Logroño, conociendo de la mano de guías locales todos los secretos de la ciudad.
En este artículo haremos un repaso a los principales lugares que ver en Logroño en unos días de vacaciones en la capital de la Rioja. Por tanto, prepara las piernas para recorrer uno de los cascos antiguos con más encanto de España, visita alguna de las bodegas con más renombre del territorio español y disfruta de la gastronomía típica de la región.
Calle del Laurel
La calle del Laurel, conocida popularmente como la Calle Laurel, es una de las calles más importantes y transitadas del casco antiguo de Logroño, ganando gran fama por ser uno de los enclaves más típicos para el tapeo en la ciudad. Esta calle se encuentra en pleno centro histórico de Logroño, cerca de la Concatedral de Santa María, y, contando con una longitud aproximada de unos 200 metros, todos llenos de lugares para deleitarse con la rica gastronomía riojana, y, con los clásicos vinos de la región.
A lo largo de esta calle hay más de 50 bares y restaurantes que ofrecen tapas y pinchos, siendo una de las calles referentes de España para el tapeo, como la calle de San Segundo en Ávila, la calle Cerón en Jaén, o, las distintas calles del barrio Húmedo en León. Las tapas más típicas que probar en esta calle son las patatas bravas, los pinchos morunos, las setas y champiñones, los embuchados, las orejas de cerdo, las pochas…, todas ellas acompañadas de un buen Rioja.
Concatedral de Santa María de la Redonda
La concatedral de Santa María de la Redonda, llamada también catedral de la Redonda, es el principal templo religioso que ver en Logroño. Se trata de una imponente construcción de estilo renacentista que se edificó durante el Siglo XV. Su llamativa fachada principal es de estilo barroco, correspondiendo a una remodelación posterior, la cuál afectó también a otras partes del templo, como las dos torres.
Se trata de un templo de tres plantas, contando con un gran deambulatorio. Este tipo de construcciones interiores es muy habitual en las iglesias y templos religiosos por los que pasa el Camino de Santiago Francés, ofreciendo a los peregrinos un amplio espacio para caminar por el interior. Dentro de esta construcción se puede encontrar el sepulcro del general Espartero, así como una magnífica Cruxifixión, conocida como El calvario de La Rioja, atribuida a Miguel Ángel. Esta obra está situada tras el Retablo Mayor de la concatedral.
Otras obras de arte que pueden disfrutar dentro de la Concatedral de Logroño son las Tablas flamencas del artista belga Gillis Congnet que datan del Siglo XVI.
Bodegas y viñedos en Logroño
El enoturismo, también llamado turismo enológico, es uno de los principales reclamos de La Rioja, y, una de las actividades obligatorias que hacer en Logroño. La visita a una de las múltiples bodegas y viñedos que pueden encontrarse en Logroño y los alrededores es vital para conocer la importancia del Rioja, un vino con una Denominación de origen calificada de España.
La producción tradicional del vino con denominación de origen Rioja consta de siete variedades autorizadas, con cuatro variedades tintas y tres blancas. Las variedades tintas son Tempranillo, Garnacha tinta, Mazuelo y Graciano, mientras que, las variedades blancas son Viura, Malvasía y Garnacha blanca. Como vemos, se producen variedades de Rioja blancas, no obstante, la producción es mayoritariamente de vino tinto, más de un 80%, y, más concretamente Tempranillo.
A lo largo de Logroño se puede realizar una cata de vinos con visita a diferentes bodegas, siendo las más recomendadas e importantes las Bodegas Franco Españolas, las bodegas Marqués de Murrieta, las bodegas Campo Viejo, las bodegas Viña Real, o, las bodegas Vina Ijalba. Cualquiera de estas bodegas ofrece una interesante visita guiada que ampliará el conocimiento sobre uno de los tesoros más reconocibles de esta Comunidad Autónoma.
Museo de la Rioja
El palacio de Espartero, situado en la plaza de San Agustín, es uno de los edificios más emblemáticos de Logroño, y, sede del Museo de la Rioja. Este edificio barroco del siglo XVIII recibe este nombre por ser el lugar en el que vivió durante muchos años el famoso general Espartero tras retirarse de la política. Dentro del conjunto barroco, destaca sobremanera la portada, con una rica ornamentación.
En cuanto a la vista al Museo de la Rioja, la colección sigue una línea histórica que se divide en varias salas, con objetos y obras de arte que abarcan desde la prehistoria hasta el arte contemporáneo. Dentro de la colección vale la pena detenerse en las interesantes pinturas y esculturas de la Edad Media, con una colección de tallas policromadas de gran valor histórico.
Otros lugares que ver en Logroño
Además de los rincones antes mencionados, existen multitud de otros lugares que ver y recorrer dentro de la ciudad de Logroño y sus alrededores. Algunos ejemplos son:
Cubo del Revellín: El cubo del Revellín es un llamativo cubo artillero que se encuentra en el interior del casco antiguo de Logroño, y, fue construido entre los años 1522 y 1524. Se trata de uno de los sectores fortificados de Logroño que mejor se conservan, contando con un pequeño foso alrededor para protegerlo de los asedios.
Puente de piedra: El puente de Piedra es uno de los cinco puentes que sobrepasa el río Ebro a lo largo de Logroño. Se trata de un símbolo de la ciudad, al ser el lugar de llegada de los peregrinos que recorren el Camino de Santiago.
Iglesia de Santiago el Real: La Iglesia de Santiago el Real es un templo del Siglo XVI que destaca por su bella fachada, siendo un rincón de paso para los peregrinos del Camino.
Parque del Ebro: El parque del Ebro, situado a la ribera del río, es un enorme parque en el que relajarse paseando, con multitud de especies de árboles y senderos que recorrer.
La casa de las Ciencias: La casa de las Ciencias es un interesantes espacio lúdico y científico que cuenta con exposiciones temporales de gran relevancia e interés.
Iglesia de San Bartolomé: La Iglesia de San Bartolomé es otra de las construcciones religiosas de Logroño, un templo construido entre los siglos XII y XVI con una mezcla de estilos, que da como resultado un acabado ecléctico.
Paseo del espolón: El paseo del Espolón, situado en los límites del casco antiguo, es una muestra del cambio urbanístico sufrido por la expansión de la ciudad durante la primera mitad del Siglo XIX, coronándose con su brillante plaza con el monumento ecuestre del general Espartero.