La F1 no tiene descanso después de la emocionante carrera en Spa, esta vez nos toca aterrizar en Monza, la catedral de la velocidad, donde Lewis Hamilton tratará de exprimir al máximo su motor Mercedes para ganar y recortar esos 7 puntos de ventaja con los que cuenta Sebastian Vettel, quiem hará lo posible por llevar a Ferrari a la cima en su GP de casa.
Pero no solo la lucha entre los líderes del mundial promete ser un atractivo en Monza, el clima puede poner de su parte, al menos durante el viernes y sábado, que es cuando las posibilidades de lluvia son más elevadas.
El Gran Premio de Italia es uno de los trazados míticos en el calendario de F1, y Monza es el perfecto exponente de velocidad en estado puro. Al igual que Mónaco en el lado contrario de la balanza, Monza requiere un coche con unas prestaciones fuera de lo habitual. Con solo tres chicanes y tres curvas como unión entre unas rectas enormes, la carga aerodinámica se sacrifica para rebajar el rozamiento mediante unos alerones especiales "tipo Monza" que favorecen la aceleración de los monoplazas hasta una velocidad punta que supera los 360 km/h.
Es tan brutal como suena, sí. La velocidad al final de recta es quizás menos importante que el ritmo que puede alcanzas el piloto en plena recta: la naturaleza de la aceleración en F1 hace que un coche que sale de curva 10 km/h más rápido mantendrá esa ventaja en toda la recta que tiene por delante.
Se presta mucha atención al comportamiento dinámico del vehículo y al ajuste de los monoplaza para subir al piano de las chicanes de Monza. Desde que se incorporaron los grandes badenes, los pilotos no pueden tomarse tantas libertades pero sigue siendo importante cortar las chicanes de Rettifilo y Roggia, y conseguir una salida fuerte hacia las rectas. Eso inclina la balanza hacia un monoplaza algo blando, pero la rapidez de la chicane Ascari requiere más un cambio rápido de dirección que implica que la suspensión no puede ser demasiado blanda. Las curvas rápidas de Parabólica y Lesmo también prefieren una suspensión más dura y más carga aerodinámica pero las características del circuito hacen que los pilotos se tengan que emplear a fondo para lidiar con un monoplaza especialmente nervioso.
Así como vimos en Spa, Mercedes aún cuenta con algo de potencia a su favor en relación con Ferrari, y por la configuración del circuito de Monza, es muy poco probable que los hombres del Cavallino Rampante puedan llevarse el triunfo en su propio patio, pero uno nunca sabe, de momento, Mercedes domina a placer los sábados y Ferrari es más fuerte los domingos, además, la diferencia entre ambos equipos es mínima, así que cualquier cosa puede pasar.
NEUMÁTICOS
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Fernando Alonso
“Al igual que Spa, Monza es uno de esos circuitos legendarios en los que todo el mundo disfruta viendo a los coches correr. Con los nuevos monoplazas de este año, más anchos y más rápidos, será sin duda otro de los circuitos en el que se verá una nueva vuelta rápida y unas velocidades increíblemente elevadas en las rectas”.
“Es el circuito más rápido del calendario en términos de velocidad punta y para un piloto es una sensación increíble correr por esas emblemáticas rectas, mezcladas con estrechas chicanes y curvas rápidas que requieren de un grado de compromiso muy alto. Siempre hemos dicho que este circuito no le iría bien a nuestro paquete, así que entendemos que será un difícil desafío. Aunque se trate de una pista parecida a la de Spa, que requiere de mucha potencia, son distintas en muchos aspectos. La de Spa es una carrera larga, mientras que el Circuito de Monza es corto y abrupto, y la carrera siempre se pasa volando”.
“Lo que más me gusta de Monza son sus aficionados. Incluso cuando no vas vestido de rojo tifosi, los fans aparecen con fuerza y muestran mucha pasión con las carreras y con el automovilismo. El Gran Premio de Italia es uno de los favoritos para mucha gente; se merece, sin duda, su legendaria reputación de circuito mágico para los aficionados a las carreras”.
Stoffel Vandoorne
“Monza es un lugar realmente genial. He corrido allí en Fórmula Renault 3.5 y también en GP2, ganando en ambas series, así que conozco bien el circuito y siempre he disfrutado mucho corriendo allí. Los aficionados son geniales, muestran mucha pasión y sientes como si su entusiasmo te empujara durante todo el fin de semana”.
“Spa fue definitivamente una carrera dura para nosotros, y siempre hemos visto Bélgica e Italia como dos fines de semana complicados para nosotros. Fue difícil gestionar nuestro ritmo con el resto de coches en las rectas, y nos estamos preparando para lo mismo en Monza. Pero, por supuesto, vamos a apretar cada día durante el fin de semana para tratar de tener las mejores posibilidades de conseguir un buen resultado”.
“Como de costumbre, lo más importante es la clasificación, pero es en la carrera dónde tenemos que trabajar en nuestro ritmo y asegurarnos de mantener nuestra posición durante el domingo por la tarde. Trabajamos muy bien como equipo en Spa para tratar de maximizar nuestra progresión a través de la clasificación y esperamos que eso influya en nuestras perspectivas para la carrera, y espero que podamos hacer más que eso el próximo fin de semana”.