Tener con quien compartir el estar pescando es una de las cosas más importantes de la jornada en el río. Puedes pescar solo o con tu compañero de siempre, pero la pesca en grupo tiene algo especial.
El pescador, generalmente, ha cambiado su manera de ser, sus hábitos y sus costumbres. El pescador solitario de hace un tiempo a dado paso, salvo excepciones, a grupos de pescadores para hacer quedadas y compartir la jornada. Son muchos los pescadores que salen con amigos y conocidos los fines de semana a pescar ríos de su provincia o limítrofes y a disfrutar de bellos paisajes, de sus pueblos, sus costumbres y su gastronomía. Aunque algunos pescadores siguen disfrutando de la comida a píe de río son muchos los que visitan los restaurantes, colaborando así en la actividad económica de la zona.
La amistad es una relación entre personas que cada una valora a su manera. La palabra amigo se usa quizás con demasiada facilidad desde que las redes sociales se han impuesto, pero ateniéndonos a los amigos de pesca no es necesario una intimidad, con compartir afición y respeto es suficiente para pasar una agradable jornada de pesca, sentirte a gusto y disfrutar.
La pesca es uno de los más bellos y apasionantes deportes, una de las más sanas y hermosas aficiones que nos ofrece un gran momento de esparcimiento y relajación. El mejor pescador no es el que coge más y mayores truchas, ni el que tiene mejor equipo, ni el que va a los mejores cotos, sino aquel que disfruta viendo pescar a otros, aquel que comparte un consejo o te ofrece la bota de vino, el mejor pescador es el que va a al río a disfrutar de la naturaleza, pescar y hacer amigos. Hay muchos pescadores y cada uno va adquiriendo sus secretos. Saber algo es a veces importante pero compartirlo lo es siempre. La pesca con amigos te enriquece, compartes y disfrutas más. Todos sabemos algo, todo nadie lo sabe.
Bebido con buenos amigos, sabe bien cualquier Vino.