La nave espacial Curiosity, descubrió una región con características hasta el momento inexplicables en la superficie de Marte. Se trata del cráter Gale, al pie de la montaña Mount Sharp, en donde fue registrada una zona de tres metros de diámetro que evidencia una emisión extremadamente alta de neutrones.
Esta anomalía, ahora corroborada por mediciones técnicas, nutre de renovadas expectativas a la teoría postulada por el físico estadounidense John E. Brandeburgo, que desde 2011 sostiene que el característico color rojo de Marte obedece a una explosión de origen termonuclear. "La superficie de Marte está cubierta de sustancias radiactivas como el uranio, el torio y el potasio radiactivo. Una explosión nuclear podría haber dejado residuos en todo el planeta", señaló en una entrevista.
Su postulado se basa en la alta concentración de Xenon-129 en la atmósfera marciana y el uranio y el torio hallados en la superficie del planeta, gracias a la exploración de la nave espacial Odyssey. Brandeburgo va aún más allá: sugiere que Marte fue habitado por dos civilizaciones humanoides, a las que denomina Cydonians y Utopians, las que habrían sido exterminadas por el bombardeo nuclear de otra raza extraterrestre.