Sin embargo, el ser el único país situado en dos continentes, Europa y Asia, con su gran amplitud y diversidad de razas le han permitido mezclar muchas más creencias y culturas que son visibles en sus famosas tradiciones.
Debido a su climatología, Moscú, tiene una visión típicamente navideña, sus calles cubiertas por el blanco de la nieve dan un aspecto acogedor e imponente. La celebración de la Navidad se realiza siguiendo el calendario de la Iglesia Ortodoxa Rusa, que cae el 7 de enero.
En toda Rusia, también esperan ansiosos la llegada de 'Ded Moroz', 'Abuelo Frío', su versión de 'Papa Noel', que siempre viaja acompañado de su nieta, 'Snegúrochka', 'Nievecita'.
El gigantesco árbol que se coloca todos los años en la plaza del Kremlin es decorado por cientos de niños con ramas y adornos de colores basándose en la bandera nacional. Igualmente, es tradición que los regalos se sitúen en su base.
El Año Nuevo se festeja el día 13 de enero, donde desde los jóvenes y no tan jóvenes se suelen disfrazar y salir a pedir, puerta por puerta, dulces y dinero. En esta fecha, abunda el champán y los pasteles. También, se cree que lo que suceda en el primer día del año se repetirá a lo largo de éste. Por tanto, si hemos pasado un buen día y una buena noche, nuestra suerte será agradecida durante los siguientes 365 días. En cambio, si hemos pagado algún cobro, nuestro sino se verá duramente afectado, con problemas económicos.
Es por ello que, albergan hasta diez días de fiesta continuados, donde no se trabaja, salvo los servicios mínimos, llegando incluso a no editarse periódico alguno. A pesar del frío, la imagen más habitual es ver las calles llenas de gente festejando la entrada de un nuevo periodo que les traerá felicidad, especialmente en su famosa 'Plaza Roja'.
Moscú es una gran ciudad como destino turístico y más en esta época del año. Podemos disfrutar de sus innumerables obras maestras, pintura, literatura, ballet. De hecho, uno de los espectáculos más recomendados es ver el ballet nacional, con representaciones como 'El Cascanueces' de Tchaikovsky o las óperas de Igor Stravinski.
Otra actividad muy solicitada es un paseo en trineo tirado por Huskies por sus abundantes bosques. También se suele patinar en sus más de 700 pistas habilitadas, aunque sin duda, el lugar más deseado es la enorme pista de patinaje de más de 40.000 metros cuadrados situada en el parque Gorki.
¿Que les ha parecido? ¿Les gustaría pasar navidad en Moscú?
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