Siempre ha sido un lugar especial no tanto por la vida actual sino porque su historia es larga, muy larga y quizás porque aquellas civilizaciones tenían un poder y un saber tan avanzados que hace pensar; ellos andaban en laboratorios mientras nosotros todavía nos peleábamos con armas de piedra. Todo un reto mentalizarse en que aquello existió y el poder de esta inmensa tierra, la misma que no tiene fin, que nunca se llega a su horizonte, la que estalla en mil colores con sus fiestas ancestrales y con sus máscaras que nos intimidan porque nos miran desde el túnel de muchos años, milenios, ciento de cientos …..
Los largos paseos a través de sus inventos, de como vivían aquellos hombres que se hacían vestir con tejidos en oro engalanados y con joyas que todavía serían la envidia de muchos joyeros de avanzado diseño actuales. Hasta que punto llegó su riqueza material y hasta que punto llegó su conocimiento científico¡
Y sin embargo llevábamos mucho tiempo desde aquel 1974 descubridor de la tumba mas fastuosamente preparada de las que se han encontrado en el mundo. La China cerrada al mundo se abría para que se pudiese contemplar lo que sus tierras contenían y el poder y la riqueza de la que podían disfrutar sus señores antiguos, no tenía límites.
Siempre la aventura para llegar hasta tan lejanos lugar, y sin embargo gracias a los contactos a través de los medios actuales se fueron facilitando para que fuésemos directos al lugar; ya dejamos las aventuras atrás cuando los años jóvenes te permiten descubrir, ahora vamos al lugar exacto que nos llama desde el otro lado del mundo.
Y allí en esta China central a unos 40 km. de la ciudad de Xi’an, los arqueólogos hicieron en 1974 un hallazgo extraordinario, la tumba del primer emperador Qin, fallecido en el año 210 a.C. Un descubrimiento que hizo ensombrecer a casi todo lo descubierto anteriormente y que me perdonen los egipcios por los que estoy escribiendo y afirmando.
Tenemos ya descubiertas cuatro secciones que están separadas y las fosas de la 1 hasta la 4 que en total son 20.000 m2 de superficie. Cerca del túnel imperial apareció algo que no estaba reflejado en ningún documento conocido: un ejército de terracota preparado para entrar en combate con sus caballos y carros de guerra. Estas figuras que tan silenciosamente guardan al emperador muerto están listos para la batalla, nos dejan como meditando y en ese momento que nos dejamos caer sobre la barandilla pensamos si no comenzarán a andar. Algo en el ambiente trae gritos de batallas… Fueron a la guerra pero la muerte les dejó a mitad del camino de la nada junto con su jefe y emperador. Allí aguardan una orden; quizás el momento para volver a la vida. El orden de colocación sigue las normas bélicas de la época, con tres columnas y el estado mayor delante. Cada estatua es diferente, no existe ninguna repetida y eso se nos hace incluso agobiante, porque los ojos juegan con las figuras y llega un momento que todo se mueve, vuelve a ser el mareo del arte.
Los uniformes y las caras vuelven a tener los colores originales de los ejércitos vivos en aquella época, y pienso yo que le quita ese aura de misterio que rodea a cada guerrero. También se pueden apreciar las etnias, puesto que los rasgos de cada casa son diferentes después de mirarlos fijamente y teniendo en cuanta su físico.
Es la guardia del emperador (figuras cuya altura es algo superior a la de un hombre normal) o quizás es que no eran normales para este planeta??… la pregunta queda en el aire. Los más de 1.500 artesanos que intervinieron en su construcción tuvieron en cuenta reflejar cuatro unidades básicas: una vanguardia de arqueros a pie sin armadura; dos unidades de caballería y carros y una unidad más de caballería y de carros repartida en ocho corredores. Las investigaciones desvelan que están enterradas unas 8.000 estatuas; hasta ahora solo hay a la vista unas 1.300.
La mejor manera de llegar hasta Xi´an es tomar el tren desde Pekín con salida nocturna, las cabinas son cómodas y las camas agradables; de esta forma no se pierde tiempo en la visita, pues por la mañana, tras el desayuno nos vamos a este mágico lugar, aconsejamos llevar guía que se puede conseguir en los buenos hoteles y que saben a donde tienen que ir y donde estaremos mejor. Por la noche es muy atractivo cenar dumplings (plato parecido a las empanadillas) en el famoso restaurante Defa Chang.
Recomendamos dos días para esta visita pues al día siguiente podemos ir a las Murallas de Xi´an y al Museo de Historia. Es típico hacer la visita a la muralla en bici y después visitar el mercado donde se pued comprar algún regalo o souvenir típico de la ciudad.
Normalmente esta visita está incluida en los Tour que operan en el país y en los cuales se visitan los centros más llamativos de la zona. Pero hoy por hoy nuestra atención estaba puesta en los guerreros que esperan a que su emperador dé la orden de batalla….
DAMADENEGRO 12/3/2009
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