Se trata de un libro ilustrado de Rébecca Dautremer que nos hará plantearnos la vida, mientras que recorremos la vida de Jacominus.
¿Qué os puedo decir de Rébecca Dautremer? Es una ilustradora francesa a la que sigo desde hace bastante. El primer libro suyo que tuve en mis manos fue Princesas, del que ya os hablaré en otra ocasión. Me encantó Alicia en el País de las Maravillas, que se lo regalé a mi sobrina Alicia al nacer para que cuando fuera más mayor lo pudiera disfrutar. Ya os iré hablando del resto de su bibliografía que es una maravilla.
La sinopsis de este libro es la siguiente:
"¿Ricas horas? ¿Cómo que ricas horas?
¡Digamos más bien toda una vida! La de Jacominus Gainsborough.
Las hojas secas del parque, la lluvia, la marea baja.
Un traspié, una despedida en el muelle, un encuentro en un jardín lleno de piedras.
Un picnic, varias carreras y la sombra fresca del almendro.
Todas esas cosas.
Una vida."
Una de las frases con las que me quedo es la que le dice su abuela Beatrix cuando era niño: "El que no tiene lo que ama debe amar lo que tiene." Todos deberíamos llevar esta enseñanza a la practica, seríamos más felices.
A lo largo de nuestra vida, se van cruzando personas en nuestro camino, algunas se pueden parecer a nosotros, otros no nos entenderán. Algunas las querremos sin remedio y con otras nos sentiremos a gusto. Habrá quien nos dé disgustos. Habrá algunas personas que merecerán plena confianza y otras de las que deberemos desconfiar. A muchas de ellas las olvidaremos inevitablemente y a otras nunca le podremos expresar todo su agradecimiento. Pero todas ellas nos ayudan a que crecer, aprender y ser las personas que somos.
A veces luchamos por no estar en una clasificación que previamente hemos hecho que puede parecerse a la que Jacominus:
"En la vida están los que no tienen suerte y otros que tienen gafe.
Están los que no entienden ni media
y otros que viven en la inopia.
Están los que solo ven el lado malo
y los que no quieren saber nada.
Hay muchos que no se atreven a decir ni mu, bastantes que aprietan
los dientes, y un montón que se dan contra la pared."
Lo importante es que tengamos claro que, a medida que envejecemos, nos damos más cuenta de cuáles son las cosas importantes, de que gastamos demasiado tiempo esperando y lo que debemos es saber decir a las personas que queremos lo mucho que disfrutamos con ellos y vivir cada momento al máximo.
Cuando seamos mayores y echemos la vista atrás, nos daremos cuenta de que quizás comenzamos nuestro viaje siendo pequeños, con inseguridades, tenido tropiezos en la vida que nos han provocado limitaciones, pero eso no nos ha permitido disfrutar los pequeños detalles que nos hacen felices. Y como Jacominus le dice a la vida, "vieja amiga, ¿sabes qué? ¡Ha valido la condenada pena vivirte!"
Te recomiendo que leas y disfrutes de las ilustraciones de Las ricas hora de Jacominus Gainsborough porque te va a hacer pensar, reflexionar y, sobre todo, te va a hacer disfrutar y te va a emocionar.
¡Qué tengas una buena semana!
Fuente: este post proviene de Pequeños Accidentes, donde puedes consultar el contenido original.
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