Así que el resultado es que tengo pequeños espacios de mini caos. Mi “espacio de trabajo” bien puede ser aquel rincón del salón, en donde tengo todas las lanas; o la mesa del comedor que está cubierta de libretas, colores, fotografías, libros, folletos. O el sofá del cuarto de la tv, donde tengo un costurero también. O al lado de la cocina, mientras hago el almuerzo.
Y no puedo seguir así. De tanto trabajar en oficinas -toda mi vida laboral, prácticamente- soy un animalito corporativo de costumbres: yo quiero mi mesa, mi silla y mi archivador. Y he decidido poner manos a la obra, gracias al empujón-apoyo de mi chico, claro. (Además era uno de mis proyectos del 2014)
Así que oficialmente anuncio: ¡Ya tengo las patas de mi futura mesa de trabajo! Falta todo lo demás, pero ya tengo algo, no?
Para el resto sólo necesito un poco de inspiración y estas son la ideas que he elegido para ir armando mi propio estudio-imaginario-escenario-espacio.
* Me gusta tener un espacio para poner nuestras fotos impresas y la idea de las pinzas de madera con una cuerda bonita me encanta, incluso podría ser tejida.
* Ilustraciones en la pared, a quien no le gustan. Pero no tengo. Por ahora solo tengo una foto de los Kennedy que podría usar.
* ¡Una rejilla! Es perfecta, y muy creativa para poder colocar cosas.
* Me gusta un escritorio grande, ancho. Así puedo colocarlo en el centro y de un lado tener el ordenador y del otro pintar, sin tener que mover las cosas.
* ¿Decorar con fotos el escritorio? Puede ser… tendría que ser de vidrio…
* Esta idea de escritorio rústico me encanta. Como ya tengo las patas sólo tendría que comprar la superficie.
* Me gusta mucho la idea de usar la barra de Ikea para organizar cosas con maceteros bonitos para los lápices.
* La forma tradicional con cajas perfectamente combinadas… sólo que no me gusta tanta perfección de color. Pero la idea de las cajas, la tomo.
* Me encantan estas cajitas de madera, sencillas y perfectas pegadas a una pared de madera (Palabras mayores la pared)
*Me encanta esta idea de usar un macetero aéreo (¿Se llaman así?) para guardar mi lana, aunque a una altura más baja, que sólo mido 1,50
* Preciosa idea los jarrones de vidrio, pero poco práctico. Quizás para los retazos, uno más pequeño como decoración…
* La forma más tradicional, con un mueble de Ikea se resuelve rápido y fácil.
* ¡Mi favorito! Una caja de madera con ruedas.
*No tengo ni donde sentarme y ya estoy pensando en los extras, jejeje. Realmente no necesito nada de esto, me parecen innecesariamente preciosos: la flecha con luces al estilo Broadway; las lamparitas chinas.
*Bueno, estas dos si las quiero: mis cactus sobre el radiador y un pequeño sofá para tejer.
Fuente: este post proviene de Simpletybs, donde puedes consultar el contenido original.
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