El presidente Sergio Marchionne ha amenazado con sacar a Ferrari de la F1.
La amenaza se produce después de que el nuevo propietario de la F1, Liberty Media, anunciara planes para cambiar las regulaciones del motor más allá de 2020, y solo unos días antes de que se anuncien los detalles de un límite presupuestario previsto para 2019.
El especialista alemán Auto Motor und Sport informa que 2019 será un año de prueba de tope presupuestario, sin sanciones por gastos excesivos y un tope de entre 100 y 200 millones de euros para no incluir el conductor, la alta gerencia o los costos de comercialización.
"Cada equipo obtendrá un contador independiente de la FIA asignado a ellos", afirma el corresponsal Michael Schmidt.
Pero a medida que los planes de Liberty para el futuro toman forma, la amenaza de abandono del presidente de Ferrari Marchionne es una clara llave en mano.
Los medios italianos citan a Marchionne diciendo que Ferrari "no jugará" a menos que Liberty y la FIA creen "circunstancias que sean beneficiosas para el mantenimiento de la marca y fortalezcan la posición única" del equipo.
En cuanto a lo que Ferrari haría si abandona la F1, Marchionne sugirió que Maranello podría ayudar a establecer una nueva serie y "celebrar hasta que las vacas vuelvan a casa".
Cuando se le preguntó cómo sería el presidente que puso fin a la larga asociación de Ferrari con la F1, Marchionne respondió: "Como un millón de dólares".
Sin embargo, reconoció que la F1 ha "sido parte de nuestro ADN desde el día en que nacimos".
Y a pesar de no haber ganado el título por duodécimo año consecutivo, Marchionne dijo que Ferrari debería estar contento de cómo le fue en la temporada 2017.
"Lo hicimos bien teniendo en cuenta nuestro punto de partida", dijo el italiano-canadiense. "Si hubiera dicho hace un año dónde estaríamos hoy, nadie me hubiera creído.
"Lamentamos no haberlo hecho mejor, pero el auto era bueno y en 2018 lo haremos mucho mejor.
"En la segunda parte de la temporada, sufrimos una mezcla de problemas técnicos y errores de los conductores", acusó Marchionne.
"Entonces, aunque fue doloroso, aprendimos mucho de la temporada", concluyó.
Finalmente, Marchionne negó inmiscuirse demasiado en el funcionamiento diario de Ferrari, insistiendo: "No, absolutamente no. Solo asisto a reuniones estratégicas".