¿Qué tal han estado estas Navidades? Para mí han significado cambios, en varios sentidos. Algunos buenos y otros malos, y me tomo esos cambios como todo en esta vida: aprendizaje. Experiencias de las que poder aprender para poder superar los nuevos retos que haya en el futuro. Esa es mi meta cada año, superar los baches que se presenten y usarlos como lección, tanto lo bueno como lo malo. Porque, seamos sinceros, el resto de cosas que me propongo no las cumplo. ¿Hay alguien que haya logrado cumplir sus propósitos de Año Nuevo alguna vez? ¡Dad un paso al frente los que lo hayáis hecho!
En otro orden de cosas, ando actualmente de mudanzas. Diciembre ha sido un mes un tanto movidito en muchos sentidos, y uno de esos cambios que ha traído ha sido empezar a mudarme. Estoy en pleno proceso de llevar cajas, traerlas, llenarlas, vaciarlas, montar y desmontar muebles... Un caos, pero espero que en unos días esté todo terminado. Lo que espero terminar este año es algo que empecé a finales de 2016. Os dejo imágenes para mostraros el proceso, pero entre malas noticias y que, literalmente, me dolían las manos del frío que hace... Ha sido difícil continuar con ello. Es la primera vez que intento algo de este estilo y estoy bastante contenta con cómo va quedando. ¡Espero vuestras opiniones!