Siempre había pensado que tenía algo de síndrome de Diógenes hasta que descubrí a la artista griega Eugenia Loli. Y me pregunté, ¿podré hacer yo maravillas con toda la mierda que guardo?
No creo que sea mi caso, pero Eugenia lo consiguió. Comenzó a almacenar en su casa una gran colección de revistas de los años 40 y 50 y a hacer collages con lo que fue recortando de ellas.
Las revistas antiguas tienen un aire surrealista gracias a sus imágenes o anuncios, muchas veces parecen casi irreales. Parece que fue esa atemporalidad lo que llamó precisamente su atención.
"Usualmente lo que hago con las escenas de collage es presentar una narrativa, pero siempre intento que la gente sienta que hay algo más grande pasando detrás de la imagen, explicó Loli. "No sé, puede ser una historia subyacente extraña o sarcástica, pero dejo ese espacio abierto para que sean las personas que ven mis obras quienes definan lo que sienten", añadió.
Perturbadores collages para protagonizar el post de los jueves. ¿Qué os parece?
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