Durante los últimos meses del año 1605, un grupo de ingleses católicos decidió volar a su rey protestante por los aires. ¿Su plan? Colocar cargas explosivas bajo el Parlamento la noche del 4 de noviembre y hacerlas detonar justo cuando Jacobo I se pasease por allí el día siguiente. Spoiler: les pillaron. Desde entonces, cada 5 de noviembre, el país celebra la "Guy Fawkes Night", un festival de fuegos artificiales y hogueras que lleva el nombre del más famoso de aquellos conspiradores fracasados. Sandby, P. (1776). Festivities in Windsor Castle [Grabado].
Guy Fawkes acabó colgado pero su legado ha llegado hasta nuestros días: suyo es el rostro que adorna la estilizada máscara del protagonista de V de Vendetta, obra cumbre de la novela gráfica que las hermanas Wachowski adaptaron al cine hace unos años. Alan Moore, legendario guionista de cómics y autor de V de Vendetta, no escogió a Fawkes al azar: el (anti)héroe protagonista de su cómic quiere replicar su atentado para acabar con el régimen dictatorial que atenaza a Reino Unido. Y vaya si lo consigue.
Diamante, V. (2008). Anonymous at Scientology [fotografía]
El éxito del cómic y sobre todo de su adaptación cinematográfica convirtieron el rostro de Fawkes en cultura popular, un icono que fue recogido por la cultura de Internet cuando se convirtió en el disfraz predilecto del grupo de hackers y activistas Anonymous. Un diseño ya legendario que une la historia de Reino Unido, la ilustración contemporánea y la cultura de la protesta.