Almuñécar y su entorno posee un micro-clima subtropical que es único en el país, lo que justifica el nombre de Costa Tropical, en la zona se cultivan frutas subtropicales como chirimoyas, aguacates, mangos, etc. En la temporada de invierno, las temperaturas raramente se sitúan por debajo de los 10º-12ºC manteniendo una media de 18º-20ºC. En verano, la media sube a los 30º C aproximadamente. Esto es debido a su especial orografía que evita el paso de corrientes frias, así como la cercania del Mar Mediterraneo que actua suavizando las temperadutas en invierno y atenuando las calidas de verano. Las consecuencias directas son un clima agradable y una rica y extensa variedad de frutos tropicales.
Para los amantes de las visitas monumentales, Almuñécar dispone de un rico patrimonino monumental que podrá visitar como el Castillo San Miguel convertido en museo, el parque botanico El Majuelo y sus salazones romanos, y el Museo Arqueologico municipal Cueva de Siete Palacios de Almuñecar.
Tambien Granada por su riqueza monumental es viaje obligado, no hay que olvidar la conocida Alpujarra en la que podrá deleitarse con los paisajes y la riqueza gastronómica de la zona, buenos caldos y mejor jamón.
Almuñécar dispone de números atractivos para visitarla, si le gusta los deportes de aventura y acuáticos ha elegido la zona ideal para realizar estas prácticas
Almuñécar cuenta con más de 12 Km. de playas limpias y aguas transparentes divididas en 16 playas, Alkisol dispone de apartamentos para usted en casi todas estas playas, siendo su principal zona de influencia las playas de Velilla, Tesorillo, Pozuelo, Galera, Cabria, Fuentepiedra, Puerta del Mar y San Cristobal .
Para los amantes del parapente y ala delta existen 12 puntos de despegue, hay también un excelente campo de golf de 18 hoyos a sólo 15 Km., en breve se construirán otros. Para los aficionados a los deportes de invierno Sierra Nevada (3.482 m.) se encuentra a tan sólo 70 Km.dispone de más de 70 Km de pistas para el deleite de los esquiadores.
Si algo tiene de placentero Almuñécar, para el visitante, son sus atardeceres (vista desde el peñon de El Santo) de tonos cálidos, en una raras tardes de comunión entre el paisaje y el fotógrafo. La calidad paisajística que podemos encontrar, en cualquiera de sus vertientes: mar, valle tropical, montaña, nos invita con desasosiego a contemplar los tesoros atemporales de una ciudad milenaria.