El asesinato de John F. Kennedy ha generado numerosas teorías de conspiración a lo largo de los años, algunas de las cuales son ampliamente debatidas y discutidas, aunque ninguna ha sido probada definitivamente. Algunas de las teorías más conocidas incluyen:
La teoría de la conspiración de la CIA: Esta teoría sugiere que la CIA estuvo involucrada en el asesinato de JFK debido a las tensiones entre Kennedy y la agencia de inteligencia, especialmente en relación con la invasión de Bahía de Cochinos en Cuba y la crisis de los misiles cubanos. Se especula que la CIA pudo haber querido eliminar a Kennedy por temor a que continuara interfiriendo en sus actividades.
La teoría de la conspiración de la mafia: Según esta teoría, la mafia estaba molesta con Kennedy debido a sus políticas en contra del crimen organizado y la persecución de figuras prominentes de la mafia como parte de la administración de su hermano, Robert F. Kennedy. Se sugiere que la mafia pudo haber organizado el asesinato como venganza.
La teoría de la conspiración del gobierno: Algunas personas creen que elementos dentro del propio gobierno de los Estados Unidos estuvieron involucrados en el asesinato de Kennedy. Esto podría incluir a grupos dentro de la CIA, el FBI o el complejo militar-industrial que podrían haberse sentido amenazados por las políticas de Kennedy.
La teoría de la conspiración de Oswald como chivo expiatorio: Esta teoría sugiere que Lee Harvey Oswald, el hombre arrestado por el asesinato de JFK, fue utilizado como un chivo expiatorio por otros conspiradores más poderosos que lo habrían manipulado o utilizado para llevar a cabo el asesinato, pero luego se aseguraron de que fuera silenciado antes de que pudiera revelar más información.
La "Comisión Warren", formalmente conocida como la "Comisión Presidencial sobre el Asesinato del Presidente Kennedy", fue establecida por el presidente Lyndon B. Johnson el 29 de noviembre de 1963, una semana después del asesinato del presidente John F. Kennedy el 22 de noviembre de 1963 en Dallas, Texas. La comisión fue nombrada en honor a su presidente, el Juez de la Corte Suprema de los Estados Unidos, Earl Warren.
La principal función de la Comisión Warren fue investigar los hechos que rodearon el asesinato de Kennedy y determinar si Lee Harvey Oswald actuó solo o si había una conspiración más amplia detrás del crimen. La comisión estuvo compuesta por siete miembros prominentes, incluidos políticos, abogados y exfuncionarios del gobierno. Algunas de las figuras notables incluyeron al senador Richard Russell, al senador John Sherman Cooper y al ex director de la CIA Allen Dulles.
La Comisión Warren llevó a cabo una extensa investigación, revisando testimonios de testigos, pruebas forenses y documentos relacionados con el asesinato. Su informe final, publicado en septiembre de 1964, concluyó que Lee Harvey Oswald había actuado solo en el asesinato de Kennedy y que no había evidencia de una conspiración más amplia. Esta conclusión ha sido objeto de debate y controversia desde entonces, y ha habido numerosas teorías de conspiración que cuestionan las conclusiones de la Comisión Warren.