Tranquilidad ante todo
Relájate, no te agobies pensando en cómo funcionarán las rotondas funcionarán, no debes preocuparte demasiado ya que si sabes conducir lo esencial no va a cambiar.
¿Qué cambia?
El volante y la palanca de cambios están en distinto lugar, pero por lo demás todo está en el mismo sitio que los coches en España. Los pedales también mantienen el orden habitual por lo que al conducir tus pies no tendrán que variar nada.
Otra cosa distinta es tu mano derecha, que involuntariamente golpeará la puerta cada vez que quiera coger la palanca de cambio o la tendencia a acercarse demasiado al lado izquierdo de la carretera. El cinturón de seguridad es otra de esas cosas que también cambian de dirección.
Consejos
Ya es bastante cambio conducir por la derecha, así que si tu coche es automático, cuando llegues a un país que cambia el sentido de la circulación no cojas uno con cambios manuales. La idea es que te sientas seguro y cómodo. No te obsesiones por tener que cambiar las marchas con la mano izquierda, es algo a lo que te acostumbrarás rápido.
En muchos de estos países la velocidad está expresada en millas y no en kilómetros por hora y normalmente los vehículos suelen tener velocímetros adaptados a ambos sistemas. En cuanto a las rotondas, un tema que sin duda preocupa, evita siempre que puedas entrar a ellas con tráfico denso, mira constantemente a la derecha y recuerda que debes girar en sentido contrario al que lo hacemos habitualmente y reincorporarte desde la izquierda.
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