San Valentín, San Valentín y San Valentín. Afuuuu
Llevo ya una temporada escuchando San Valentín por todos los sitios, anuncios, carteles, tiendas... pues eso, hasta en la sopa.
Hartita acabo de este tema y que hago yo? Pues escribo sobre ello, claro que sí. Olé por mi.
En San Valentín podemos encontrar 5 tipos de personas.
1- Las persona que tienen pareja y están entusiasmadas con la llegada del gran día.
Les verás semanas antes de la llegada del día emocionadísimos contándote lo que le regalarán a su pareja, los planes que tienen para el día y lo mucho que se quieren. Así hasta atragantarte con tanto derroche de amor.
2- Los que tienen pareja y pasan de este día.
En este grupo me puedo incluir yo. Desde que comencé con mi pareja quedamos en no celebrar este día. Esto es un tema que hay que hablarlo desde el principio, no vaya a ser que tu pareja sea un eufórico de esta fecha. (En ese caso, habría que llegar a un consenso)
Llegado el día, ¿qué hacemos? vida normal, aquí no ha pasado nada y tragarnos todas las fotos y mensajes amorosos de nuestros amigos del Facebook.
Cuánto Amor, cuánto amor!!
3-Los que no tienen pareja y se mueren por encontrar una para celebrar San Valentin.
Se acerca la fecha y yo si pareja Dios míoooo nooo ¿Cómo puede ser?
Y es aquí, donde comenzará una intensa búsqueda de pareja para esa fecha, da igual que no dure más la relación que esa noche, lo importante es no estar solo ese día.
4-Los que no tienen pareja y son felices y comen perdices.
Genial por ellos! Son los que ni tienen, ni les hace falta tener pareja para hacer de este día un 10.
¿Para qué tener pareja sí lo puedes celebrar estupendamente con un amigo/a?
Ellos lo que celebran es San Solterín. (Tenía que meter este termino en honor a un gran amigo) Va por ti.
5- Los que este año esperan San Valentín para el estreno de The walking Dead.
Ya ha llegado el día. Sed felices.
Nunca he entendido este día. ¿Demostrar el amor un día del año?
A mí me lo tienen que demostrar día a día. En lo bueno y en lo malo.
No me hacen falta ni joyas, ni una cena romántica en el restaurante más caro de la ciudad.
A mí, dame una buena hamburguesa, dame unas cuantas risas.
Hasta la próxima amigos.
Unaaburrida.