Félix Rodríguez de la Fuente
El "gran defensor del lobo" convirtió su pasión por la naturaleza en su forma de vida, algo que demostró en El Hombre y la Tierra (1974-1981), una serie de televisión rodada en España, Venezuela, Canadá y Alaska que fue todo un reto cinematográfico por el gran peso de sus equipos y su gran dificultad para transportarlos.
Esta popular serie documental de 124 episodios quedó inconclusa por la repentina muerte de Félix a los 52 años en un accidente de avioneta en Alaska. Aun así, se calcula que El Hombre y la Tierra ha sido vista por 1.500 millones de personas en todo el planeta.
Félix y su pasión por los animales
Su perfeccionismo era extremo y se comenta que la misma toma se repetía desde distintos ángulos para no perder el más mínimo detalle. Poca gente sabe que antes de saltar a la fama, en 1961, trabajó como asesor de cetrería en la película El Cid, rodada en España.
Félix fue un adelantado a su tiempo y usaba palabras como "ecosistema", "ecología" o "sostenibilidad del planeta". Fue el responsable de respetar el interés por la fauna, la naturaleza, así como la conservación de las especies en vías de extinción. Y desterró y demostró ese falso mito de la maldad del lobo. Además, siempre acababa sus reportajes con un mensaje positivo y esperanzador.
Félix, el cazador naturalista
Hoy su legado sigue vivo y permanece en la conciencia de todos. Coincidiendo con este 40 aniversario, su hija Odile acaba de publicar un libro que recopila sus pensamientos.
Por cierto, la muerte del divulgador sigue siendo un misterio y se habla sobre una posible conspiración (asesinato), pues Félix fue un personaje molesto para las altas esferas por sus reivindicaciones.
La serie completa aquí.