Jules Verne
Querido diario:
¿Quién no recuerda aquéllos maravillosos dibujos animados... La vuelta al mundo en 80 días con Willy Fog?
Eran unos dibus que me encantaban cuando era peque, recientemente he investigado y resulta que... ¡son bastante fieles a la novela! una auténtica pasada porque pensaba que me habían dado gato por liebre pero no, exceptuando que los personajes son animales que hablan como en la mayoría de animaciones para niños, la historia la copiaron bastante bien y para que podáis apasionaros como yo os presento...
La reseña en 8 paradas de Chicka Lit
1º Salida: Nos encontramos con dos personajes que se conocen de pura casualidad: el Señor Fogg, un distinguido caballero inglés tan puntual y correcto como aficionado al juego y las apuestas, y su nuevo criado de apellido Passepartout, un responsable francés que ha tenido tantos cambios de empleo que busca la tranquilidad en su nuevo señor. Ambos retratados de forma tan concienzuda y divertida que puedes crear una imagen perfecta de ellos con solo cerrar los ojos.
2º La apuesta: Debemos tener mucho cuidado con lo que apostamos sobre todo si nos lo jugamos todo a una sola carta o como le sucedió a Fogg, que se lo jugó todo a la exactitud que lo caracteriza pues prometió a sus compañeros de juegos de cartas que podría dar la vuelta al mundo en tan solo 80 días considerando hasta incluso los imprevistos, algo escandaloso para la época teniendo en cuenta lo rudimentario de los medios de comunicación y la lentitud de los transportes.
3º Sorpresas: Inesperadas y maravillosas como las que me he encontrado no solo al leer esta obra sino también al ojear todo el material que lo acompaña pues con la contextualización, los mapas y las actividades posteriores a la lectura (que contiene este ejemplar) es imposible no enamorarse de un clásico del gran Jules Verne al que han dedicado una escultura en mi ciudad.
4º Contratiempos: Porque en toda aventura que se precie siempre tiene que haber un giro, dificultades y en este caso, un oficial convencido de la criminalidad de nuestro protagonista casi desde los primeros capítulos, algo que no nos dejará indiferentes e incluso le dará a la lectura el ingrediente picante que hace irresistibles a los libros.
5º Aprendizaje: ¿Que pensarías, pequeño gran lector, si además de disfrutar de la lectura aprendieras un par de detallitos casi sin darte cuenta? ¿No sería ideal que las novelas estuvieran todas tan bien documentadas como ésta? Pues además de trabajada se nota que hay detrás de ella muchísimos conocimientos que muestra el autor con una facilidad de la que es imposible que te resulte dificultosa su comprensión ¡una delicia para el paladar literario!
6º Cultura: Si hay algo que valoro efusivamente en cualquier arte ya sea escritura, escultura o incluso cine son los diferentes paisajes, las culturas mostradas, costumbres totalmente diferentes a la mía, que hacen de mi ratito lector un apasionante conjunto de descubrimientos sin moverme del sofá.
7º Llegada: Lo que más rabia me da de cualquier viaje ya sea real o literario es la vuelta a casa o en este caso, acabar una obra, no obstante, me enorgullece quedarme con recuerdos tan bonitos como si yo misma hubiese atravesado los continentes junto al excéntrico Fogg como siempre perfectamente acompañada de unas ilustraciones que no podrían ser más expresivas.
8º Agradecimientos: Y por último no podría acabar mi reseña sin regalar un enorme gracias a los editores de Vicens Vives que me hacen llegar lo que ya es casi una colección de clásicos ilustrados que no os podéis perder.
Fuente: este post proviene de Diario de una Chicka Lit, donde puedes consultar el contenido original.
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