Toto Wolff, jefe del equipo Mercedes, espera una lucha al estilo "ping-pong" entre las flechas de plata y los hombres del equipo con sede en Maranello.
Tras haber ganado en Australia, Vettel tuvo que conformarse con un 2° lugar en China, siendo derrotado por Hamilton en una carrera complicada por los cambios climáticos. "China fue una gran manera de golpear de nuevo en la batalla con Ferrari", explicó Wolff. "Estamos muy cerca del ritmo y espero una batalla de ping-pong durante la temporada, dependiendo de la pista", explicó.
"Lo que tenemos en 2017 es la situación perfecta para los aficionados y también para nosotros como un equipo. Todos somos corredores y estamos muy emocionados por esta pelea. Dos carreras en la temporada y ahora es 1: 1 entre Mercedes y Ferrari. Y después de competir en un circuito muy diferente, en condiciones muy diferentes, está claro que estamos muy unidos - y que los márgenes pequeños harán la diferencia", expuso.
Wolff añadió que Mercedes ha adoptado la mentalidad del "oprimido", a pesar de haber ganado 52 victorias de 61 carreras y sucesivos duelos desde el inicio de la etapa de 1.6 litros V6 en 2014.
"Nuestra ventaja de un punto en el Campeonato de Constructores es cualquier cosa menos un margen cómodo", dijo Wolff. "Necesitamos - y lo haremos - seguir trabajando con todo lo que tenemos para desarrollar nuestro coche, corregir nuestros errores y seguir mejorando. Nuestra mentalidad es la de los oprimidos, no el campeón, y la lucha acaba de comenzar".
Mercedes ha reclamado la victoria en Bahrein durante los últimos tres años.