¿Te gusta la idea de ver una película de terror?

Los años 2010 han presentado a los fanáticos del terror una fila de películas fenomenales de un asesino; Get Out , The Guest, The Witch, It Follows, Hereditary y docenas más han visto que el género de terror se ha vuelto más accesible para el público que nunca. Parte de la razón de esta "nueva ola" de enfriadores aclamados por la crítica proviene de un enfoque renovado en los miedos contemporáneos que van más allá de los slashers de poca profundidad y los festines de antaño perezosos de antaño. Si bien el género de terror siempre ha tenido un punto de vista más amplio y películas más diversas e interesantes de las que suele atribuirse, en la década de 2010 las audiencias generales finalmente se sintonizaron con películas que de otro modo podrían haber sido ignoradas a favor de los baños de sangre más contundentes y con machete.

Una película que contribuyó absolutamente al nuevo renacimiento del horror es The Babadook, de la directora australiana Jennifer Kent . La película tiene mucho que decir sobre el dolor y el agotamiento de la maternidad, a la vez que da miedo al infierno. Es tan aterrador hoy como lo fue cuando se lanzó por primera vez en 2014, en parte debido a su final ambiguo y de mal humor. Si está en una mirada o en un libro, no puedes deshacerte de Babadook ... pero puedes entenderlo. Aquí está el final de El Babadook explicado.

Babadook comienza cuando Amelia experimenta el evento traumático que subraya toda la película: la muerte de su esposo en un accidente automovilístico en el camino hacia el hospital por el nacimiento de su hijo, Samuel. Es fácil de leer como un flashback o una horrible pesadilla, pero es justo decir que el accidente automovilístico que mató a Oskar es el único evento en su vida que ha importado durante los últimos seis años. Cuando se cae en la cama en la escena inicial, es como si los últimos seis años desde ese momento solo hayan sido un sueño.

Samuel tiene seis años, y nuestro primer vistazo es que él está despertando a Amelia. Es una metáfora de un tema que hace eco a lo largo de toda la película. Amelia está durmiendo a través de sus días y está marcando las horas hasta que los tiempos oscuros se desvanecen, pero está totalmente atrapada en la muerte de Oskar, un evento que está tan entrelazado con el nacimiento de Samuel que lucha por ser la madre que él necesita que sea. Y desafortunadamente para ella, Samuel no es un niño fácil de criar.