Las ambiciones de Sebastián Vettel en el Campeonato Mundial de Fórmula 1 podrían sufrir otro revés tras un extraño incidente después de la carrera en la desaceleración al final del Gran Premio de Malasia.
El piloto de Ferrari, que ahora está a 34 puntos del líder del campeonato Mercedes Lewis Hamilton, con cinco carreras restantes, estuvo en una colisión con Williams, de Lance Stroll, en la vuelta más lenta.
El impacto destruyó la parte trasera izquierda del Ferrari con posibles daños a la caja de cambios, lo que supondría una penalización de cinco puestos si necesitara reemplazarla para Japón el próximo fin de semana.
Vettel se vió obligado a regresar a los pits montado en el Sauber de Pascal Wehrlein.
Cuando se le preguntó si esperaba tener que cambiar la caja de cambios después de la colisión y sufrir una penalización en Suzuka, Vettel respondió: "Espero que no porque, como he dicho, era completamente innecesario".
Vettel había comenzado en el último lugar después de un problema de la unidad de poder en la calificación, pero trabajó en una gran remontada hasta el cuarto lugar en una actuación que hizo hincapié en el ritmo del coche y lo que podría haber sido de otra manera. Hamilton fue segundo.
Podría haber sido aún peor para el alemán, sin embargo, su compañero de equipo, Kimi Raikkonen, no pudo comenzar después de una pérdida de potencia en el camino a la parrilla.
"Todo se sumó a nuestra carrera más dura del año, ya que tuvimos que enfrentar problemas que ahora analizaremos en profundidad", comentó el director del equipo, Maurizio Arrivabene.
Vettel sugirió que Stroll, de 18 años, no había estado buscando a dónde iba, pero el canadiense parecía desconcertado por eso. Los comisarios decidieron no tomar ninguna otra medida.
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