Para empezar nunca deje de limpiar mi rostro. Siempre he lavado mi piel con lociones que se enjuagan y no con cremas limpiadoras. Esto lo hago por decisión personal, ya que considero que una loción o crema limpiadora no puede dejar mas limpio el rostro que una loción de espuma para enjuague, la cual ademas de ser mas refrescante para la piel permite lavar todo residuo de maquillaje, exceso de grasa o impurezas que haya captado la piel. Esto lo hago religiosamente en las mañanas y en las noches con una loción especial para la piel o una loción neutra (ph neutro).
Otro de los pasos que considero muy importante para tener una piel joven, fresca y luminosa es la exfoliacion. En uno de mis artículos anteriores nombro algunos elementos naturales, de fácil acceso y muy económicos que uso para exfoliar mi piel. No es necesario usar cremas costosas. Solo un poco del residuo del café colado en las manos o un poco de azúcar morena (o blanca) pueden servir para exfoliar la piel. Yo lo uno con un poco de loción limpiadora y froto suavemente hasta el cuello y el escote. Incluso también puedes exfoliar toda la piel de tu cuerpo si lo haces al momento de la ducha. La exfoliacion es importantisima para levantar células muerta de la piel y revelar una piel mas tersa y revitalizada. Para mi es un vital paso en el proceso del antiaging.
En algunas oportunidades seria bueno frotar la pulpa del limón o la naranja en la piel del rostro. Ademas de proporcionar mucha luminosidad y una dosis de vitamina C natural, tiene efecto antiséptico lo cual ayuda mucha con pequeños brotes en la piel. Este paso es importante hacerlo en las noches y nunca en las mañanas, ya que el limón tiene tiene efecto con los rayos del sol, pudiendo ocasionar manchas en la piel.
Una buena hidratacion ayuda a evitar lineas de expresión y ayuda a tener una piel mas suave y fresca.