Hola a todos y bienvenidos un día más. Ya sabéis que los jueves hago el post sobre la marcha, sin corregir ni nada, lo que me sale.
Ahora mismo estoy con un café calentito, mi gatito en el regazo y muy poca inspiración, jejeje.
La verdad es que a veces las musas me abandonan, llevo más de dos años haciendo esta sección y se me agotan los temas, jejeje.
Pero hoy, así dando vueltas a la cabeza, me ha dado por pensar en esas personas quejicosas a las que parece molestar la felicidad ajena.
Y sin más rollo empezamos.
Yo soy muy Hakuna matata, opino que hay que vivir y dejar vivir, y claro, siempre excluyo la gente que maltrata, que hace daño a los animales o casos extremos, me refiero a la vida de los demás, sin más.
Y es que con lo bonita que es la vida y la cantidad de cosas buenas y agradables que podemos hacer, no entiendo porqué la gente pierde minutos de vida en criticar que otros se diviertan.
Las pasadas navidades yo no tenía gana de nada, por mí me habría metido en la cama el día 22 de diciembre y me habría levantado el 8 de enero, pero claro, la vida no va a sí.
No fueron unas grandes navidades, las primeras sin un ser querido nunca lo son, pero no me dediqué a margar a nadie con mis penas, y no solo eso, sino que me encantaba y encanta ver a los demás disfrutar.
Me parece genial que las familias se reúnan, y los amigos, que los niños reciban regalos de Reyes, Papá Noel, amigo invisible y lo que se tercie, y ver los nervios de los peques en la cabalgata de Reyes es algo que me chifla.
No me gusta nada que la gente critique a los que lo pasan bien, que digan que no están los tiempos para gastar, que no lo están, es cierto, pero si pueden, mientras no se lo roben ni quiten a nadie, pues que lo hagan. Yo, al igual que la mayoría, siempre he intentado dar a los míos todo lo posible.
Pasa igual con las fiestas. A mí nunca podría molestarme ver a gente joven divirtiéndose(divertirse no implica beber y beber) en Halloween o Carnaval, al contrario, me parece genial ver a la gente pasarlo bien.
Aunque el año pasado me sintiera fatal eso no me daba derecho a ser El Grinch, al contrario, ver a los demás divertirse, en vez de hundirme me anima a buscar lo bueno, a intentar salir del pozo y a recuperarme.
Y en Carnaval igual, me encanta ver a la gente currarse los disfraces, a veces me río y otras alucino al ver la imaginación que tiene.
Esto lo hago extensivo a más cosas, a la gente que parece que se molesta porque otros hagan cosas, ya sea un viaje, ir a cenar o simplemente ir a pasear.
Recuerdo que mi madre tenía una conocida muy descarada, que nunca hacía nada porque era de ir al bar a diario, lo que me parece genial mientras no opine de los otros. Pues mis padres siempre fueron muy discretos y no decían lo que hacían ni donde iban, pero un año en el que hicimos un buen viaje, que mi madre pagó ahorrando y con mucho esfuerzo, la señora se enteró porque su administrador de la comunidad era el mismo que teníamos nosotros, al cual le dijimos que ibamos de viaje y le dimos copia de las llaves por si acaso(cosas que se hacían antes), y el hombre se fue de la lengua.
Pues cuando lo supo vino a casa, llamó al timbre y le dijo a mi madre que por qué nos íbamos de viaje, que era muy caro para ser de "clase media", le dijo de todo, y lo peor es que mi madre, tenía tal vergüenza ajena que no sabía ni qué decir.
Evidentemente con ella desde entonces mantuvimos las distancias, pero más que lo que dijo, que yo estaba delante, fue el tono de odio.
Y eso lo viví muchas veces, en el cole de mis hijos, en extraescolares, con amigas...cuando alguien hace algo siempre tiene que haber quien lo critique, quien saque a relucir sus "carencias". Si alguien iba de viaje siempre había quien decía que mejor gastaba ese dinero en; clases particulares, ropa de marca, extraescolares o simplemente en cambiar de colegio. Si gastaba en ropa que mejor lo gastaba en salir, si era en comida que mejor en ir a otro cole...el caso es criticar.
¿Pero a los demás que les importa? Ya hablé hace poco de lo mucho que tendemos a juzgar, y esto en el fondo es un poco más de lo mismo, pero es que lo sigo viendo mucho.
Si vemos a alguien diviertiéndose parece que molesta. Pues a mí me gusta ver a la gente feliz, me gusta que se celebren fiestas y la gente vaya, me gusta ir a un merendero y ver a los niños jugando, pasar por un parque y sentir voces infantiles, me encanta que llegue la Navidad y todo se ilumine, qué ya sé que no están los ayuntamientos para derrochar, pero bueno, un poco de luz y color viene genial, y me gusta que la gente haga planes.
Me parece triste entrar en un bar o en un cine y que no haya nadie, tampoco es que quiera pelearme por un sitio pero sí que tenga ambiente.
Me apetece que las calles se llenen de vida, me gustan esos días de frío en los que la gente corre de un sitio a otro cargados con paquetes de brillantes colores, es precioso ver las caras de emoción de los niños, ver a las abuelas con los carritos de la compra llenos de cosas que seguramente cenarán en familia y me gusta ver ese ambiente que se capta la tarde de Nochebuena, cuando mucha gente va a tomar algo antes de cenar.
Y odio a la gente que te ve y dice que no sabe donde está la crisis porque ha visto mucha gente en el cine, centro comercial, bar o donde quiera que haya ido. Claro que había mucha gente, pero es que somos muchos y claro, no todo el mundo tiene problemas y pocos que vayan a un sitio lo llenan, la crisis sí que la hay, por desgracia, pero; ¿por qué te molesta que la gente salga?
Ya empiezo a divagar, me he terminado el café(voy a ir a por otro porque no soy persona), pero de momento sigo unos minutos más por aquí ya que mi querido gato no se ha bajado del regazo y no quiero despertarlo.
Para terminar diré que ese grupo de aguafiestas lo hago extensible a este mundo 2.0. Si alguien hace algo, sale en unas fotos, hace un viaje o lo que sea, siempre tiene que venir otro a chafarle la alegría. Qué ya sé que se expone a eso mostrando lo que hace, soy consciente y por eso yo no lo hago, pero eso no da derecho a que nadie te estropee tu diversión.
No me extraña que algunos programas de la tele tengan tanto éxito, se dedican a quitarle la alegría a los demás, es un reflejo claro de esta sociedad.
Bueno, no quiero seguir que además de hacer un post eterno no quiero irme con mal sabor de boca. Y ya que quiero irme contenta me despido con una escena que vi ayer y me encantó.
En la tarde de ayer fui a un centro comercial a por unas compritas, y al salir, iba hablando con mi marido(en realidad tenía un ataque de risa de lo más bobo) cuando reparé en una zona en la que hay unas butacas y un par de puf, donde se puede uno sentar. Pues había 4 señoras mayores allí sentadas, las de los puf estaban muy graciosas, y las cuatro estaban hablando y riéndose totalmente ajenas a lo graciosas que estaban. Una de ellas tenía unos ojos muy brillantes y una risa muy cantarina; no sabéis qué ternura me dio esa escena.
Es que es bonito ver a otros felices.
Bueno, no me enrollo más, simplemente quería quejarme un poco y ahora ya estoy de muy buen humor para afrontar el jueves. Me espera un día ajetreadísimo, pero pienso que podré pasear bastante a última hora de la tarde y me hace mucha ilusión. Y buscaré esas calles que me gustan tanto, que huelen a cenas y a hogar.
Muchas gracias por leerme y muy feliz jueves. Nos vemos el sábado con el resumen semanal, y estaba pensando en publicar de lunes a viernes este mes, a partir del lunes, al menos hasta Nochebuena.
¡¡¡¡¡¡Hasta el sábado!!!!