¿Pensando en las vacaciones?
Nosotros este año las cogeremos prontito, al menos una parte.
Javier está en estos momentos haciendo el Camino de Santiago con su
padre y en poco más de una semana estaremos los dos en Tailandia
junto a un grupo de amigos.
Luego Javi tendrá su primer interrail por Europa y yo me tomaré unos
días en un destino tranquilo y rural.
Javier ha superado su primer curso de carrera, ¡con nota!, y eso se
merece un verano "a full".
Aún tengo algunos lugares de nuestras destinos de vacaciones anteriores
que compartir con vosotros por si os decidís a visitarlos y os sirve de ayuda.
Hoy una última entrega de nuestro viaje al pueblo azul de Chaouen que
visitamos estas Navidades y, si entonces se mostraba precioso, puedo
imaginar cómo lucirá en esta época del año, exultante de vegetación.
Ya os mostré el magnífico bed & breakfast en el que nos hospedamos,
Casa Perleta, que en sí mismo merece una visita a este precioso pueblo
marroquí, un mágico atardecer desde La Alcazaba y una excursión
imperdible a las Cascadas de Akchour donde vivimos una experiencia
maravillosa.
Nuestro último paseo será por el viejo Chaouen que se encuentra fuera
de la muralla.
Una agradable excursión rodeados agua y verde pues seguiremos el curso del
río hasta llegar a los antiguos lavaderos que aún siguen siendo utilizados para
lavar alfombras y también para hacer la colada.
Un lugar donde se respira calma y en el que el tiempo parece haberse detenido.
A lo largo del río, en la zona más próxima al pueblo encontraremos puestos
de zumos y chiringuitos donde disfrutar de este tranquilo entorno.
Siguiendo el curso del río, a la derecha, hay una colina coronada por una
edificación blanca con minarete.
Se trata de la antigua mezquita española construida durante el
protectorado español y restaurada hace poco como centro de
actividades culturales puesto que la población autóctona
apenas la utilizó para su uso religioso.
La edificación en sí misma no es gran cosa pero destacan las vistas
panorámicas del conjunto de Chaouen, distinguiéndose perfectamente
la parte antigua, dentro de la muralla, de la parte nueva.
Un paseo muy agradable en un entorno tranquilo salpicado de pequeñas granjas
con economía de subsistencia en las que no faltan, sin embargo, lindos jardines.
Si finalmente os decidís a visitar Chaouen me encantaría que me contarais.
Soy toda oídos.