Lo dicho, que vivo aquí. Aquí en Disney, quiero decir. Que yo cuando vuelva a Madrid y me pregunten dónde he estado de Erasmus voy a contestar que en Disneyland, porque decir cualquier otra cosa sería mentir, la verdad.
Yo sé que ahora mismo estaréis pensando: «Esta chica tiene un problema con Disney». Pero no. Yo lo que tengo es el Passeport Annuel, o sea: un bono anual para ir todas las veces que quiera. Además, estos meses, todo el que venga conmigo paga solo 21? por entrar a los dos parques (el precio normal es de 89? por lo mismo, para que os hagáis una idea). ¿Entendemos ahora por qué voy tanto? (Ahora vosotros también queréis venir conmigo ¿eh?) Y ni si quiera es la última vez que voy a ir antes de volver a España. (Bailecito de la alegría).
De todas formas, eso, que no he ido demasiadas veces. Quiero decir, yo sé que he ido muchas porque ya reconozco a los bailarines de las cabalgatas y a los seguratas de los personajes (y puede que me sepa el nombre de alguno), pero demasiadas significaría que ellos me reconocieran a mí también. Y de momento no. (Dadme tiempo).
Por cierto, ¿os podéis creer que no era la única llevando este modelito el otro día en el parque? Lo de las orejas vale, OBVIO que no era la única, pero, ¿el mismo mono de Zara con las orejitas de Minnie? Pero, ¿esto qué es? ¿No podía haberse puesto una camiseta de la Selección Española como el 85% de los españoles que había allí? (Que ya hablaremos de lo decepcionada que estoy con este asunto. Aunque supongo que si perdieron es porque van a ir los 23 a darle una paliza a
P. D.: Sí, esa es mi hermana. Y sí, es la guapa de las dos.
P. D. 2: En las fotos no se aprecia, pero yo, que vivo allí, me quemé como si no hubiera un mañana y mi hermana, que viene de turista, como viene morena-que-te-mueres de España, allí como en su salsa. Qué injusta es la vida.