La episiotomía es un corte quirúrgico que se realiza después del parto en el área muscular (perineo), ubicado entre la vagina y el ano con la finalidad de ampliar la apertura vaginal.
Este procedimiento quirúrgico se realizaba constantemente con la finalidad de acelerar el parto y evitar desgarros en la vagina.
Sin embargo, la “Husband Stich” lejos está de ser un procedimiento inofensivo. Tras años de investigación, se ha confirmado que este procedimiento puede causar problemas en la mujer.
Por ello, el Congreso Estadounidense de Obstetras y Ginecólogos (ACOG), han mostrado su acuerdo en que este procedimiento NO debería llevarse a cabo.
Una nueva investigación lo confirma. El estudio fue realizado por Carrie Murphy y publicado en Healthline, y advierte de lo traumático que puede ser la experiencia para las mujeres.
En Camboya, por ejemplo, se descubrió que las mujeres que se realizan este procedimiento, lo hacen con la finalidad de tener una vagina más estrecha y hermosa.
Para algunas enfermeras como Stephanie Tillman, también bloggera de “The Feminist Midwife”, “el hecho de que haya incluso una práctica así, es un ejemplo perfecto de la objetivación de los cuerpos de las mujeres y su salud.
Por mucho que tratemos de eliminar la cosificación de las mujeres durante la atención obstétrica apropiada, el patriarcado encontrará su camino allí".
Además de la carga cultural y social, la episiotomía puede provocar los siguientes riesgos:
El corte puede desgarrarse y aumentar de tamaño durante el parto
Puede haber más hemorragia.
El corte, así como los puntos de sutura pueden infectarse.
Las relaciones sexuales pueden ser muy dolorosas durante los primeros meses tras el parto.
Al final, es una decisión tuya, pero es importante que tengas la información correcta para tomar la mejor decisión.